LD (EFE) Desde el Zócalo de la Ciudad de México, que permanece ocupado por miles de miembros y simpatizantes del PRD, Andrés Manuel López Obrador rechazó el fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación que designó presidente electo al candidato conservador, Felipe Calderón. "Desconozco a quien pretende ostentar como titular del Poder Ejecutivo Federal sin tener una representación legítima ni democrática", dijo.
Los jueces miembros del TEPJF declararon válidas las elecciones del dos de julio y declararon por unanimidad presidente electo de México a Calderón, del Partido Acción Nacional (PAN), que sucederá a Vicente Fox el próximo primero de diciembre. En su dictamen, el organismo admitió que en el proceso electoral hubo irregularidades, principalmente por la intervención del presidente Vicente Fox y de organizaciones empresariales. Sin embargo, consideró que no eran tan graves como para invalidar los comicios presidenciales.
López Obrador acusó a los jueces de no estar a la altura para actuar como hombres libres al emitir su fallo. Añadió que "los magistrados del tribunal electoral se sometieron. No tuvieron el arrojo, la dignidad, el orgullo, la arrogancia de actuar como hombres libres y optaron por convalidar el fraude electoral".
El líder de la coalición de izquierdas Por el Bien de Todos señaló que con este fallo "se violó la voluntad popular y se fracturó el orden constitucional". Calificó a Calderón como un "presidente ilegítimo, espurio y pelele" y añadió que mantendrá su lucha en favor de los más pobres del país porque "no voy a traicionar al pueblo de México".