LD (Agencias) Bill Rammel, secretario de Estado responsable de derechos humanos en el Foreign Office, se reunió con Cossío para decirle que “el Reino Unido considera que los arrestos de personas como periodistas y economistas con una vida civil normal no está justificada”. El secretario de Estado subrayó que “la reciente oleada de detenciones en Cuba es deplorable” y pidió que los detenidos tengan un “acceso inmediato” a un abogado.
Rammel dijo que “condenamos la falta de libertades y derechos fundamentales en Cuba y pedimos una vez más al Gobierno cubano que respete las normas internacionales estipuladas en la Declaración Universal de los Derechos Humanos”. Según el representante del Foreign Office, las detenciones de disidentes políticos son “extremadamente negativas para la imagen de Cuba, que tanto ha hecho por construir una sociedad con buenos indicadores sociales”.
Amnistía Internacional (AI) manifestó también su “preocupación” por la detención de opositores políticos cubanos “privados de libertad por el ejercicio pacífico de sus derechos a la libertad de expresión y asociación”. En un comunicado emitido desde su sede en Londres, la organización pro derechos humanos denunció la “operación policial de gran envergadura” efectuada en la isla en las últimas semanas, que describió como “la mayor campaña de represión de toda la década”.
Rammel dijo que “condenamos la falta de libertades y derechos fundamentales en Cuba y pedimos una vez más al Gobierno cubano que respete las normas internacionales estipuladas en la Declaración Universal de los Derechos Humanos”. Según el representante del Foreign Office, las detenciones de disidentes políticos son “extremadamente negativas para la imagen de Cuba, que tanto ha hecho por construir una sociedad con buenos indicadores sociales”.
Amnistía Internacional (AI) manifestó también su “preocupación” por la detención de opositores políticos cubanos “privados de libertad por el ejercicio pacífico de sus derechos a la libertad de expresión y asociación”. En un comunicado emitido desde su sede en Londres, la organización pro derechos humanos denunció la “operación policial de gran envergadura” efectuada en la isla en las últimas semanas, que describió como “la mayor campaña de represión de toda la década”.