L D (EFE) En una entrevista publicada este viernes por el diario The New York Times, el primer ministro libio, Shukri Mohamed Ghanim, explicó que su país espera ser recompensado por estar dispuesto a permitir las inspecciones del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) y por el desmantelamiento de sus programas de armas de exterminio.
El primer ministro advirtió en su entrevista con el periódico, que a menos que Estados Unidos levante las sanciones que pesan sobre Libia antes del 12 de mayo, su país dejará de estar comprometido a pagar los seis millones de dólares prometidos a las familias de cada una de las víctimas del atentado contra el avión de la PanAm perpetrado cuando sobrevolaba Lockerbie (Escocia), en 1988.
Para Ghanim, un rápido levantamiento de las sanciones permitiría a las empresas petroleras estadounidenses regresar a Libia, y allanar el camino para desbloquear los 1.000 millones de dólares que están depositados y congelados en bancos de EEUU, según recoge The New York Times. Ghanim dijo al diario que su país querría "acelerar al máximo" el desmantelamiento de sus programas de armas nucleares, químicas y biológicas. De esta manera, afirmó, el presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, podría decir en los próximos meses al Congreso que el líder libio, Muamar Gadafi, ha destruido o entregado de manera completa y transparente sus armas prohibidas.
El diario recuerda las declaraciones que hizo Bush hace unas semanas, cuando dijo que la reciente decisión de Libia de renunciar a su armamento prohibido y de recompensar a las víctimas del atentado de la PanAm "abre la puerta a la posibilidad de mejorar las relaciones, incluido el levantamiento de las sanciones".