L D (EFE) En declaraciones a la Cadena Ser, recogidas por Efe, Bernardino León se ha referido así a las manifestaciones que el ex presidente del Gobierno hizo tras la liberación el pasado fin de semana de las cuatro azafatas que permanecían detenidas, en la que dijo sentirse humillado por el hecho de que se hubiera hecho efectiva tras viajar el presidente francés, Nicolas Sarkozy.
León ha dicho que el PP "tenía información de lo que estábamos haciendo" y ha explicado que cuando tuvieron conocimiento de la liberación de las azafatas, lo que ocurrió, según explicó, cinco días antes del viaje de Sarkozy, según ha dicho, él se lo comunicó personalmente a Jorge Moragas, secretario de Relaciones Internacionales del partido.
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores ha señalado además que durante el tiempo que los españoles estuvieron retenidos ha habido "momentos difíciles" porque había presión interna y mediática, pero ha destacado que, aunque podía "haberse complicado", el Gobierno se ha esforzado para aportar la información necesaria que "acelerara al máximo" la solución del problema.
Ha destacado que para llevar a cabo gestiones diplomáticas "siempre paga la discreción, tomarse las cosas con tiempo y frialdad y saber respetar a quienes están al otro lado", aunque ha subrayado que "es mucho mas fácil cuando se trata de demostrar la inocencia de un inocente".
El auxiliar de vuelo Daniel González, que llegó ayer a Madrid junto a los otros dos tripulantes del avión, también en declaraciones a la Cadena Ser, ha manifestado que durante su cautiverio "estuvimos todos juntos como una tripulación" y ha señalado que gracias al cónsul español en Camerún, Vicente Mas, han estado informados de todo.
Ha indicado además que su relación con los franceses, que aún siguen allí detenidos acusados del supuesto intento de secuestro de 103 niños africanos a través de la ONG "El Arca de Zoé", era "muy fría" y "se notaba que algo se cocía por ahí".
León ha dicho que el PP "tenía información de lo que estábamos haciendo" y ha explicado que cuando tuvieron conocimiento de la liberación de las azafatas, lo que ocurrió, según explicó, cinco días antes del viaje de Sarkozy, según ha dicho, él se lo comunicó personalmente a Jorge Moragas, secretario de Relaciones Internacionales del partido.
El secretario de Estado de Asuntos Exteriores ha señalado además que durante el tiempo que los españoles estuvieron retenidos ha habido "momentos difíciles" porque había presión interna y mediática, pero ha destacado que, aunque podía "haberse complicado", el Gobierno se ha esforzado para aportar la información necesaria que "acelerara al máximo" la solución del problema.
Ha destacado que para llevar a cabo gestiones diplomáticas "siempre paga la discreción, tomarse las cosas con tiempo y frialdad y saber respetar a quienes están al otro lado", aunque ha subrayado que "es mucho mas fácil cuando se trata de demostrar la inocencia de un inocente".
El auxiliar de vuelo Daniel González, que llegó ayer a Madrid junto a los otros dos tripulantes del avión, también en declaraciones a la Cadena Ser, ha manifestado que durante su cautiverio "estuvimos todos juntos como una tripulación" y ha señalado que gracias al cónsul español en Camerún, Vicente Mas, han estado informados de todo.
Ha indicado además que su relación con los franceses, que aún siguen allí detenidos acusados del supuesto intento de secuestro de 103 niños africanos a través de la ONG "El Arca de Zoé", era "muy fría" y "se notaba que algo se cocía por ahí".