LD (Agencias) La Misión de Paz de la Unión Europea (UE) que se desplegará próximamente en la convulsionada provincia de Ituri, en el nordeste de la República Democrática de Congo (RDC), podría tener que enfrentarse a un ejército de niños. Se estima que la mitad de los 12.000 efectivos que componen las fuerzas de la Unión de Patriotas Congoleses (UPC), formada por miembros de la tribu "hema", son menores. La edad media de la milicia es de 16 años. Francois Grignon, de la organización "International Crisis Group", dijo que "cabe la posibilidad de que haya escaramuzas y si los niños-soldado participan se les puede disparar. Pero la desproporción en armas es tan grande que dudo de que las milicias planteen un gran combate, aunque sí puede haber mucha hostilidad y, si las milicias no son desarmadas, puede crearse una situación explosiva".
La UE aprobó el envío de fuerzas de pacificación al Congo, en lo que será su primera misión fuera de Europa y sin el respaldo de la OTAN. La decisión, que tiene la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU, debe ser refrendada por el Consejo de Ministros europeo. Liderada por Francia, que aportará 700 del total de 1.400 soldados, su misión será pacificar Bunia, escenario de violentos combates inter-tribales en los que han muerto al menos 430 personas desde que el Ejército ugandés se retiró a principios de mayo. Los enfrentamientos no se han limitado al control de la ciudad, sino al asalto indiscriminado de civiles, cuyos cadáveres han poblado durante días las calles de la ciudad, mientras cientos de heridos de machete se hacinan en el hospital.
Con un contingente de 700 soldados, principalmente uruguayos, la Misión de Naciones Unidas para el Congo (MONUC), que por mandato no puede intervenir militarmente, se ha visto desbordada por la violencia y apenas ha podido garantizar su propia seguridad y la de quienes han buscado refugio en sus dependencias. A diferencia del contingente uruguayo, la misión de la UE, cuyo mandato terminará el primero de septiembre, podría usar la fuerza si fuera necesario para restablecer la paz.
La UE aprobó el envío de fuerzas de pacificación al Congo, en lo que será su primera misión fuera de Europa y sin el respaldo de la OTAN. La decisión, que tiene la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU, debe ser refrendada por el Consejo de Ministros europeo. Liderada por Francia, que aportará 700 del total de 1.400 soldados, su misión será pacificar Bunia, escenario de violentos combates inter-tribales en los que han muerto al menos 430 personas desde que el Ejército ugandés se retiró a principios de mayo. Los enfrentamientos no se han limitado al control de la ciudad, sino al asalto indiscriminado de civiles, cuyos cadáveres han poblado durante días las calles de la ciudad, mientras cientos de heridos de machete se hacinan en el hospital.
Con un contingente de 700 soldados, principalmente uruguayos, la Misión de Naciones Unidas para el Congo (MONUC), que por mandato no puede intervenir militarmente, se ha visto desbordada por la violencia y apenas ha podido garantizar su propia seguridad y la de quienes han buscado refugio en sus dependencias. A diferencia del contingente uruguayo, la misión de la UE, cuyo mandato terminará el primero de septiembre, podría usar la fuerza si fuera necesario para restablecer la paz.