LD (EFE) Según InterChina, este "boom" de inversiones estará motivado por el incremento de capital de las inversiones provenientes de las grandes y medianas empresas familiares industriales, por el incremento inversor de las grandes y medianas compañías en el sector servicios y por la entrada de las grandes multinacionales.
InterChina cree que el 2006 será un "punto de inflexión" para la aparición de las multinacionales españolas en China que, a su juicio, "aportarán una mayor estructura y garantía en el país", siendo Madrid la región que liderará las inversiones en los sectores de finanzas, distribución, telecomunicaciones y energías, seguida de Cataluña y el País Vasco.
La consultora señaló, además, que China se ha convertido en un país "de grandes oportunidades" para las empresas españolas del sector energético, automoción, consumo y químico, y en "una amenaza y obligación" para compañías relacionadas con el sector textil, juguetes y calzado, "que no tendrán más remedio que estar presentes en el país asiático".
En cuanto al presente ejercicio, InterChina prevé que la inversión española en este país alcance los 60 millones de euros, lo que supone un incremento del 50 por ciento respecto al ejercicio anterior, sin contar con la inversión de 500 millones de euros efectuada por Telefónica en la compra de una porción de un operador chino. La consultora considera que las inversiones españolas más importantes durante el 2005 en China se han derivado de las actividades del grupo Mondragón –que ha establecido un parque industrial donde se han instalado cuatro fábricas–, de Roca –con inversiones de nuevas fábricas al este de China– y del grupo Antolín –con un importante crecimiento para cubrir el mercado de componentes de automoción–.
InterChina reveló también que el 70 por ciento de las empresas orientadas a la producción en China "están generando beneficios", mientras que un 20 por ciento se limita a cuadrar sus cuentas y un 10 por ciento pierden dinero. Por último, la consultora internacional estima que la economía china seguirá creciendo durante el próximo año en torno al 8 por ciento, siendo el sector privado uno de sus principales motores, mientras que las exportaciones aumentarán a un ritmo entre el 10 y el 15 por ciento, y las importaciones se orientarán a los suministros energéticos y de materias primas.
InterChina cree que el 2006 será un "punto de inflexión" para la aparición de las multinacionales españolas en China que, a su juicio, "aportarán una mayor estructura y garantía en el país", siendo Madrid la región que liderará las inversiones en los sectores de finanzas, distribución, telecomunicaciones y energías, seguida de Cataluña y el País Vasco.
La consultora señaló, además, que China se ha convertido en un país "de grandes oportunidades" para las empresas españolas del sector energético, automoción, consumo y químico, y en "una amenaza y obligación" para compañías relacionadas con el sector textil, juguetes y calzado, "que no tendrán más remedio que estar presentes en el país asiático".
En cuanto al presente ejercicio, InterChina prevé que la inversión española en este país alcance los 60 millones de euros, lo que supone un incremento del 50 por ciento respecto al ejercicio anterior, sin contar con la inversión de 500 millones de euros efectuada por Telefónica en la compra de una porción de un operador chino. La consultora considera que las inversiones españolas más importantes durante el 2005 en China se han derivado de las actividades del grupo Mondragón –que ha establecido un parque industrial donde se han instalado cuatro fábricas–, de Roca –con inversiones de nuevas fábricas al este de China– y del grupo Antolín –con un importante crecimiento para cubrir el mercado de componentes de automoción–.
InterChina reveló también que el 70 por ciento de las empresas orientadas a la producción en China "están generando beneficios", mientras que un 20 por ciento se limita a cuadrar sus cuentas y un 10 por ciento pierden dinero. Por último, la consultora internacional estima que la economía china seguirá creciendo durante el próximo año en torno al 8 por ciento, siendo el sector privado uno de sus principales motores, mientras que las exportaciones aumentarán a un ritmo entre el 10 y el 15 por ciento, y las importaciones se orientarán a los suministros energéticos y de materias primas.