LD (EFE) Una potente bomba que derribó una de las paredes laterales y parte del techo de una mezquita chií de Karachi, ha causado la muerte de veinte personas y heridas de diversa consideración en otras cincuenta, según ha informado la Policía local.
Un portavoz de las autoridades locales explicó que, tras el atentado terroristas, miles de chiítas enfurecidos se manifestaron por la ciudad y tres personas resultaron muertas al disparar la Policía para disolver a los participantes en la protesta, que prendieron fuego a varios coches y comercios y cortaron algunas calles.
La tensión entre las comunidades musulmanas es extrema en Karachi, donde unos 15.000 policías se encontraban desplegados desde la mañana de ayer lunes, tras el asesinato el domingo del clérigo musulmán suní Nizamuddin Shamzai, ocurrido a un kilómetro de la explosión de anoche en la mezquita chiíta del Imán Bargah Ali Reza.