LD (Agencias) Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea aprobaron el lunes en Luxemburgo una declaración en la que condenaron las "recientes acciones de las autoridades cubanas, especialmente las ejecuciones, las detenciones de disidentes a gran escala, los juicios injustos y las sentencias arbitrarias y excesivas impuestas". Además, los cancilleres de los Quince advirtieron que estas acciones "afectarán a las relaciones de Cuba con la UE y a la perspectiva de un incremento de la cooperación entre ambas partes". El viernes fueron ejecutadas en Cuba tres de las once personas que participaron en el secuestro de una lancha de pasajeros con el propósito de llegar a EEUU, que concluyó con la liberación de unos cincuenta rehenes ilesos tras cerca de 50 horas de tensión. Unos días antes, los tribunales cubanos condenaron a 1.454 años a 75 disidentes, acusados de "conspirar con EEUU" y atentar contra el Estado.
La UE, que inauguró oficialmente una oficina en La Habana el pasado 10 de marzo -ocho días antes de que comenzaran las detenciones de disidentes-, estudia la posibilidad de "aparcar" la solicitud cubana, tras los acontecimientos registrados en la isla en las últimas semanas, según fuentes diplomáticas. Las mismas fuentes apuntaron que, aunque todavía no hay una decisión cerrada en la UE sobre la situación de Cuba, es "posible" que su solicitud de ingreso en Cotonú quede "aparcada" un tiempo. Esto se debe, especialmente, porque parte de los Quince ya habían manifestado sus reservas sobre la entrada de Cuba en este Acuerdo. El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque, dijo el pasado miércoles que su gobierno no aceptará presiones de la UE y no descartó la posibilidad de retirar su solicitud de adhesión al acuerdo.
El citado convenio es un pacto de asistencia económica que regula una relación privilegiada entre la UE y el Grupo de estados menos desarrollados de África, el Caribe y el Pacífico (ACP). Aunque Cuba está dentro del Grupo ACP, es el único de sus 78 países miembros que no ha firmado el Acuerdo de Cotonú y, por tanto, hasta ahora no puede beneficiarse de los 13.500 millones de euros de ayudas que la UE concederá a esos países hasta el 2005.
La UE, que inauguró oficialmente una oficina en La Habana el pasado 10 de marzo -ocho días antes de que comenzaran las detenciones de disidentes-, estudia la posibilidad de "aparcar" la solicitud cubana, tras los acontecimientos registrados en la isla en las últimas semanas, según fuentes diplomáticas. Las mismas fuentes apuntaron que, aunque todavía no hay una decisión cerrada en la UE sobre la situación de Cuba, es "posible" que su solicitud de ingreso en Cotonú quede "aparcada" un tiempo. Esto se debe, especialmente, porque parte de los Quince ya habían manifestado sus reservas sobre la entrada de Cuba en este Acuerdo. El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque, dijo el pasado miércoles que su gobierno no aceptará presiones de la UE y no descartó la posibilidad de retirar su solicitud de adhesión al acuerdo.
El citado convenio es un pacto de asistencia económica que regula una relación privilegiada entre la UE y el Grupo de estados menos desarrollados de África, el Caribe y el Pacífico (ACP). Aunque Cuba está dentro del Grupo ACP, es el único de sus 78 países miembros que no ha firmado el Acuerdo de Cotonú y, por tanto, hasta ahora no puede beneficiarse de los 13.500 millones de euros de ayudas que la UE concederá a esos países hasta el 2005.