LD (Agencias) La jefa de Estado dedicó a los atentados terroristas del pasado 12 de octubre en la isla indonesia de Bali, en los que murieron 202 personas, la parte principal en su discurso del estado de la nación ante la Asamblea Consultiva del Pueblo (Cámara Alta). "La cantidad de personas que participó en este acto de terrorismo no fue mucha, pero su fanatismo ciego a su dogma es una amenaza que aterroriza", señaló Megawati. Los tribunales de Denpasar, capital de Bali, comenzaron a juzgar en mayo a los sospechosos de esos atentados y un total de 33 personas pasarán por el banquillo de los acusados. Las explosiones de Bali se han atribuido al grupo Yemaah Islamiya, considerado como el brazo armado de Al-Qaeda en el Sudeste Asiático.
"Nos guste o no, lo creamos o no, entendemos que nuestra nación no es sólo un objetivo del terrorismo internacional, sino también una fuente de actores que planean, ejecutan y apoyan ese tipo de acciones", destacó Megawati. Hasta los atentados de Bali, las autoridades indonesias habían descartado que el terrorismo hubiera echado raíces en su país y habían resistido la presión internacional para llevar a cabo una acción concertada.
Sobre otros problemas de la nación, la mandataria defendió la operación militar iniciada contra los focos separatistas en la conflictiva provincia de Aceh, en el norte de la isla de Sumatra. El pasado 19 de mayo, el Gobierno declaró la ley marcial en Aceh y comenzó una ofensiva contra el Movimiento de Liberación de Aceh (GAM, siglas en indonesio), que hasta la fecha ha causado más de 400 rebeldes muertos y otros 600 detenidos.
"Nos guste o no, lo creamos o no, entendemos que nuestra nación no es sólo un objetivo del terrorismo internacional, sino también una fuente de actores que planean, ejecutan y apoyan ese tipo de acciones", destacó Megawati. Hasta los atentados de Bali, las autoridades indonesias habían descartado que el terrorismo hubiera echado raíces en su país y habían resistido la presión internacional para llevar a cabo una acción concertada.
Sobre otros problemas de la nación, la mandataria defendió la operación militar iniciada contra los focos separatistas en la conflictiva provincia de Aceh, en el norte de la isla de Sumatra. El pasado 19 de mayo, el Gobierno declaró la ley marcial en Aceh y comenzó una ofensiva contra el Movimiento de Liberación de Aceh (GAM, siglas en indonesio), que hasta la fecha ha causado más de 400 rebeldes muertos y otros 600 detenidos.