L D (EFE) La Policía cantonal de Ginebra informó de que un hombre telefoneó a sus servicios y alertó de que había colocado dos artefactos explosivos en la estación de trenes de la ciudad y en unos grandes almacenes. "Una voz masculina anónima al teléfono dijo que había colocado una bomba en la estación de trenes de Cornavin, por lo que se ordenó la evacuación", dijo un portavoz policial.
Otro portavoz de la Policía, Philippe Casandey, declaró, por su parte, que la alerta recibida afectaba, además de a la estación de trenes, a unos grandes almacenes situados en el centro de la ciudad. Añadió que tras la llamada sobre la amenaza a ambos lugares, que calificó como "sitios estratégicos" de Ginebra, comenzó la evacuación de los grandes almacenes y su inspección por brigadas de desminado y perros adiestrados en la detección de explosivos. "Esa inspección ha finalizado sin haber encontrado artefacto explosivo alguno", dijo el portavoz, que agregó que se ha abierto una investigación para determinar de dónde procedía la llamada.
Las autoridades helvéticas procedieron a la evacuación de la estación, situada en el centro de Ginebra, y a la interrupción de todo el servicio ferroviario a las , así como de tranvías y autobuses de la zona. El portavoz policial agregó que se acordó un perímetro de seguridad en torno a la estación de cincuenta metros, lo que suposo el cierre al tráfico de coches, autobuses y tranvías, así como de peatones, de las calles que rodean el edificio.
Otro portavoz de la Policía, Philippe Casandey, declaró, por su parte, que la alerta recibida afectaba, además de a la estación de trenes, a unos grandes almacenes situados en el centro de la ciudad. Añadió que tras la llamada sobre la amenaza a ambos lugares, que calificó como "sitios estratégicos" de Ginebra, comenzó la evacuación de los grandes almacenes y su inspección por brigadas de desminado y perros adiestrados en la detección de explosivos. "Esa inspección ha finalizado sin haber encontrado artefacto explosivo alguno", dijo el portavoz, que agregó que se ha abierto una investigación para determinar de dónde procedía la llamada.
Las autoridades helvéticas procedieron a la evacuación de la estación, situada en el centro de Ginebra, y a la interrupción de todo el servicio ferroviario a las , así como de tranvías y autobuses de la zona. El portavoz policial agregó que se acordó un perímetro de seguridad en torno a la estación de cincuenta metros, lo que suposo el cierre al tráfico de coches, autobuses y tranvías, así como de peatones, de las calles que rodean el edificio.
Un portavoz de la Compañía de Trenes Suiza (CFF), André Dorthe, afirmó, por su parte, que el tráfico ferroviario entre las ciudades de Ginebra y Lausanne, fronterizas con Francia, que es una de las principales del país, fue interrumpido por completo.
Precisó que el tráfico de trenes de alta velocidad (TGV) procedentes de Francia fue también interrumpido y que se calcula que más de quince mil pasajeros han resultado afectados por esta amenaza, que se ha producido en hora punta. Esta es la segunda alerta por amenaza de bomba que afecta a la ciudad de Ginebra en menos de una semana, pues el pasado cinco de octubre la sede europea de Naciones Unidas, que se ubica en esta ciudad, anunció un incremento de sus medidas de seguridad ante una situación similar.
Sin embargo, las fuentes policiales consultadas indicaron que "por el momento no se puede establecer relación alguna entre las dos amenazas". La sede europea de la ONU recibió una alerta de las autoridades suizas ante la posibilidad de que la institución fuera objetivo de un posible ataque terrorista entre el cinco y el diez de octubre. Ginebra es la sede de Naciones Unidas en Europa –se trata del recinto más grande de la ONU después del de Nueva York–, y alberga a todas las agencias humanitarias de la institución multilateral. En sus instalaciones trabajan más de cuatro mil personas y cada año acoge más de ocho mil reuniones de diferentes niveles.
Precisó que el tráfico de trenes de alta velocidad (TGV) procedentes de Francia fue también interrumpido y que se calcula que más de quince mil pasajeros han resultado afectados por esta amenaza, que se ha producido en hora punta. Esta es la segunda alerta por amenaza de bomba que afecta a la ciudad de Ginebra en menos de una semana, pues el pasado cinco de octubre la sede europea de Naciones Unidas, que se ubica en esta ciudad, anunció un incremento de sus medidas de seguridad ante una situación similar.
Sin embargo, las fuentes policiales consultadas indicaron que "por el momento no se puede establecer relación alguna entre las dos amenazas". La sede europea de la ONU recibió una alerta de las autoridades suizas ante la posibilidad de que la institución fuera objetivo de un posible ataque terrorista entre el cinco y el diez de octubre. Ginebra es la sede de Naciones Unidas en Europa –se trata del recinto más grande de la ONU después del de Nueva York–, y alberga a todas las agencias humanitarias de la institución multilateral. En sus instalaciones trabajan más de cuatro mil personas y cada año acoge más de ocho mil reuniones de diferentes niveles.