LD (EFE) La Policía holandesa detuvo este viernes a unas treinta personas de origen kurdo que mantenían un campo de entrenamiento del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), organización armada separatista declarada ilegal en Turquía, situado cerca de Liempde, en el sur del país. Las autoridades no han proporcionado más información al respecto.
Una portavoz de la Fiscalía holandesa, Desirée Leppens, aseguró que las detenciones no tiene relación alguna con las últimas operaciones policiales llevadas a cabo por los incidentes violentos desencadenados tras el asesinato del cineasta Theo Van Gogh y que se cree obra de islamistas radicales.
Las relaciones entre Holanda y Turquía han sufrido problemas en los últimos meses a causa de la extradición demandada por Ankara de una de los cabecillas del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), Nuriye Kesbir.