(Libertad Digital) Según cuentan testigos, los enfrentamientos empezaron ayer por la noche después de que la policía inspeccionara en un monasterio en Xinjiang para incautar las imágenes del Dalai Lama.
Las autoridades entraron en cada una de las habitaciones del monasterio de Donggu en la zona sur de la región, confiscando todos los móviles y las fotografías.
La noticia firmada por la corresponsal The Times en Pekín, Jane Macartney, explica cómo un monje de 74 años identificado como Cicheng Danzeng intentó revelarse contra la inspección policial, igual que un joven trabajador del centro religioso, Cicheng Pingcou de 25 años, y los dos fueron finalmente arrestados.
A primera hora de la mañana los monjes junto a cientos de locales acudieron hasta el campamento de la policía paramilitar para reclamar la liberación de los dos arrestados.
La manifestación que coreaba los gritos de “Larga vida al Dalai Lama”, “Dalai Lama vuelve” y “Nosotros queremos libertad” se extendió durante dos horas y media. Cerca de las 9:00horas, unos 1.000 policías paramilitares, según testigos presenciales, abrieron fuego contra la multitud.