L D (EFE) Tras reunirse con el comandante de la Fuerza KFOR de la OTAN, el general Holger Kammerhoff, con el jefe de la misión de la ONU en Kosovo (UNMIK), Harri Holkeri, y con los líderes políticos albaneses y serbios, Scheffer dijo en rueda de prensa que "la violencia desatada en Kosovo es una vergüenza y todos deben condenarla".
"He venido a informarme de primera mano de la situación en Kosovo y a transmitir el mensaje de la Alianza de que todos los líderes albaneses tienen que condenar la violencia, dedicarse a sanar la situación y trabajar en restablecer la confianza mutua", destacó. "La KFOR ha venido a Kosovo a defender a cada individuo, a cada ciudadano. Estoy de acuerdo con Holkeri en que la violencia de la semana pasada estaba orquestada y organizada por parte de los factores extremistas albaneses", continuó.
Scheffer dijo que la ONU, la Unión Europea y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) trabajan juntos analizando la situación y las medidas que adoptarán para impedir que vuelvan a repetirse "situaciones como esta". El secretario general llegó a Kosovo acompañado por el comandante de la OTAN para el sur de Europa, Gregory Johnson, y por el presidente de turno de la OSCE, el búlgaro Solomon Passy.
Holkeri visitó este lunes el enclave serbio de Lipljan, al sur de Pristina, uno de los más afectados por los choques de la semana pasada, donde enfatizó que la UNMIK trabajará para que los serbios desplazados por la violencia puedan regresar a sus hogares. Añadió que la policía internacional está investigando lo ocurrido y que los responsables de estos ataques, que son conocidos por las fuerzas internacionales, deben ser aislados de la sociedad y llevados ante la Justicia.
El portavoz de la policía de la UNMIK, Derek Chappell, dijo que la situación está este lunes tranquila, que no se han registrado incidentes y que el tráfico transcurre normalmente en todas las carreteras, con un control reforzado de la KFOR y la UNMIK. "La policía de UNMIK ha arrestado hasta el momento a 163 personas sospechosos de saqueo, incendio, asesinato y otros delitos durante la ola de violencia de la semana pasada en Kosovo", añadió.
"He venido a informarme de primera mano de la situación en Kosovo y a transmitir el mensaje de la Alianza de que todos los líderes albaneses tienen que condenar la violencia, dedicarse a sanar la situación y trabajar en restablecer la confianza mutua", destacó. "La KFOR ha venido a Kosovo a defender a cada individuo, a cada ciudadano. Estoy de acuerdo con Holkeri en que la violencia de la semana pasada estaba orquestada y organizada por parte de los factores extremistas albaneses", continuó.
Scheffer dijo que la ONU, la Unión Europea y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) trabajan juntos analizando la situación y las medidas que adoptarán para impedir que vuelvan a repetirse "situaciones como esta". El secretario general llegó a Kosovo acompañado por el comandante de la OTAN para el sur de Europa, Gregory Johnson, y por el presidente de turno de la OSCE, el búlgaro Solomon Passy.
Holkeri visitó este lunes el enclave serbio de Lipljan, al sur de Pristina, uno de los más afectados por los choques de la semana pasada, donde enfatizó que la UNMIK trabajará para que los serbios desplazados por la violencia puedan regresar a sus hogares. Añadió que la policía internacional está investigando lo ocurrido y que los responsables de estos ataques, que son conocidos por las fuerzas internacionales, deben ser aislados de la sociedad y llevados ante la Justicia.
El portavoz de la policía de la UNMIK, Derek Chappell, dijo que la situación está este lunes tranquila, que no se han registrado incidentes y que el tráfico transcurre normalmente en todas las carreteras, con un control reforzado de la KFOR y la UNMIK. "La policía de UNMIK ha arrestado hasta el momento a 163 personas sospechosos de saqueo, incendio, asesinato y otros delitos durante la ola de violencia de la semana pasada en Kosovo", añadió.