(Libertad Digital) Los redactores del plan 'Consenso País', elaborado por la Comisión del mismo nombre –adscrita a la Coordinadora Democrática–, considera que "Venezuela ha sido víctima de un proceso de destrucción integral que ha resquebrajado sus bases institucionales, económicas, políticas, sociales, morales y anímicas". Por ello, propugnan "restablecer la convivencia pacífica y democrática entre los venezolanos bajo el techo común de una nación cohesionada".
El plan de la oposición sostiene que Venezuela vive una "pesadilla económica", con "cifras sin precedentes" de paro y de economía sumergida: "Más de 2.400.000 personas están desempleadas, y más de 5 millones están en el sector informal". Para salir de tal marasmo, los impulsores del 'Consenso País' creen "imprescindible la inversión privada, cuya necesidad tenderá a acentuarse para financiar los costosos proyectos requeridos".
Si el ex golpista Hugo Chávez pierde el referendo del 15 de agosto y, consecuentemente, es desalojado del poder, el Gobierno de reconciliación nacional que promueve la Coordinadora Democrática deberá "provocar el retorno de capitales nacionales e internacionales" y "priorizar las inversiones de acuerdo a su capacidad para generar empleo".
En cuanto a la política internacional, el citado Gabinete definiría "una clara posición frente al terrorismo y al narcotráfico", "sin caer en sumisiones que no tienen ningún sentido", en clara referencia al alineamiento del actual Gobierno con la dictadura de Fidel Castro. Los redactores de 'Consenso País' pretenden "restablecer relaciones sólidas y de confianza mutua con los países y bloques que constituyen nuestros socios más naturales y propicios", de los cuales "la reciente política internacional" seguida por Hugo Chávez, afirman, "nos ha alejado absurdamente".