L D (Agencias) El primer ministro británico, Tony Blair, mantiene en este segundo día de la cumbre de Bruselas que no traspasará las "líneas rojas" que ya marcó previamente. Junto con la Carta de Derechos Fundamentales la cuestión del ministro de Asuntos de Exteriores de la UE con plenos poderes, que contiene el Tratado Constitucional, es la que levanta más suspicacias entre las filas británicas.
Blair no está dispuesto a ceder a la UE el timón de la política exterior y exige que se preserve la soberanía de los Gobiernos. En concreto, fuentes británicas aseguraban el miércoles que el premier no piensa aceptar que la capacidad de representación del titular de Exteriores en el Consejo de Seguridad de la ONU.
Zapatero, sin embargo, defendió durante el almuerzo de este viernes todo lo contrario. De acuerdo con su propuesta, el Alto Representante de la Unión Europea sería, a la vez, vicepresidente de la Comisión Europea y presidente permanente del Consejo de ministros de Relaciones Exteriores.
Pese a que los órganos de propaganda del Gobierno de Zapatero, con El Pais a la cabeza, están vendiendo como una gran aportación del presidente español el cambio de término, de ministro de Asuntos Exteriores comunitario por el del Alto Representante de la UE, lo cierto es que la prensa internacional ha pasado de puntillas sobre este asunto y se ha concentrado más en las dificultades de las negociaciones y en la posibilidad del veto polaco.
En el diario frances, Le Figaro, por ejemplo,se hace una pequeña mención al cambio nominal, pero, no se lo atribuyen en ningún caso al jefe de Gobierno español.