L D (EFE) "Recibí una información la pasada semana de fuentes creíbles que aseguran que Karadzic está ahora en Belgrado", ha dicho la fiscal al término de la reunión que ha mantenido mantuvo este miércoles en Bruselas con el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana.
"Karadzic -en paradero desconocido desde 1996- reside ahora en Belgrado" que en estos momentos es un "lugar seguro para los fugitivos", añade del Ponte. La fiscal dice que el TPIY, creado por la ONU para juzgar los crímenes cometidos durante las guerras de la antigua Yugoslavia, no dará por concluida su misión hasta haber juzgado a Karadzic y al ex comandante serbio Ratko Mladic, también prófugo. El TPIY "no cerrará sus puertas hasta tenerlos en La Haya", insiste.
La fiscal admite que no sabe aún cómo conducir hasta la Justicia a los dos criminales de guerra, pero hace hincapié en que, entre tanto, el caso seguirá abierto. Karadzic, acusado de genocidio en Bosnia durante la guerra (1992-1995), encabeza la lista de los acusados del TPIY junto con el ex líder militar serbobosnio, el general Ratko Mladic, también prófugo. El Tribunal le acusa de once cargos, entre ellos genocidio y complicidad de genocidio, cinco crímenes de lesa humanidad que incluyen asesinato y deportaciones, tres por violaciones del derecho y costumbre de la guerra y uno por graves violaciones de la Convención de Ginebra.
Del Ponte se muestra preocupada por la actitud de las autoridades de Belgrado, cuya cooperación con el Tribunal de La Haya "está congelada". La fiscal, quien señala que siempre ha encontrado en la UE "un gran apoyo" y "una puerta abierta", pide a los Quince que "hagan presión" sobre los países de los Balcanes. "Lo más importante es que los países de los Balcanes cooperen, y para ello a veces es necesaria la presión internacional", señala la fiscal.
"Karadzic -en paradero desconocido desde 1996- reside ahora en Belgrado" que en estos momentos es un "lugar seguro para los fugitivos", añade del Ponte. La fiscal dice que el TPIY, creado por la ONU para juzgar los crímenes cometidos durante las guerras de la antigua Yugoslavia, no dará por concluida su misión hasta haber juzgado a Karadzic y al ex comandante serbio Ratko Mladic, también prófugo. El TPIY "no cerrará sus puertas hasta tenerlos en La Haya", insiste.
La fiscal admite que no sabe aún cómo conducir hasta la Justicia a los dos criminales de guerra, pero hace hincapié en que, entre tanto, el caso seguirá abierto. Karadzic, acusado de genocidio en Bosnia durante la guerra (1992-1995), encabeza la lista de los acusados del TPIY junto con el ex líder militar serbobosnio, el general Ratko Mladic, también prófugo. El Tribunal le acusa de once cargos, entre ellos genocidio y complicidad de genocidio, cinco crímenes de lesa humanidad que incluyen asesinato y deportaciones, tres por violaciones del derecho y costumbre de la guerra y uno por graves violaciones de la Convención de Ginebra.
Del Ponte se muestra preocupada por la actitud de las autoridades de Belgrado, cuya cooperación con el Tribunal de La Haya "está congelada". La fiscal, quien señala que siempre ha encontrado en la UE "un gran apoyo" y "una puerta abierta", pide a los Quince que "hagan presión" sobre los países de los Balcanes. "Lo más importante es que los países de los Balcanes cooperen, y para ello a veces es necesaria la presión internacional", señala la fiscal.
"Declaraciones irresponsables de la fiscal"
Poco después de conocer las declaraciones de la fiscal, el Gobierno de Serbia negaba tener información de que Karadzic resida en Belgrado. "Es una de la serie de declaraciones irresponsables que la fiscal efectúa desde hace tres años", ha dicho el primer ministro saliente de Serbia, Zoran Zivkovic. "Constantemente habla de cosas como ésas o similares, pero hasta ahora no ha ofrecido ninguna información que ayude a la captura de los acusados, y menos aún que pruebe sus afirmaciones", añade.