LD (EFE) Scott McClellan, el portavoz de la Casa Blanca, ha declarado desde la localidad de Derry (Nuevo Hampshire), donde el presidente George Bus participaba en un acto electoral, declaró que "plantea muchos interrogantes serios que deben resolverse" el escándalo sobre los falsos documentos presentados por la CBS y que ponían en duda el procedimiento del mandatario para cumplir su servicio militar.
El portavoz apuntó a una posible responsabilidad por parte de los demócratas ya que, subrayó, "ha habido informaciones acerca de que (Bill) Burkett ha mantenido contactos de alto nivel con la campaña de (el candidato demócrata a las elecciones, John) Kerry. Eso plantea interrogantes". En comunicado, la CBS señaló que Burkett, un ex oficial de la Guardia Aérea Nacional de Texas, "ha reconocido que proporcionó los documentos ahora en disputa" y que "engañó deliberadamente" a una productora de la cadena acerca del origen de los informes.
McClellan se preguntó "¿cuáles eran esos contactos(demócratas) y de qué se habló con Bill Burkett? ¿Quién fue la fuente original de esos documentos y quién fue el responsable de falsificarlos?". En un primer momento, la CBS insistió en la autenticidad de esos documentos pero finalmente este lunes emitió un comunicado en el que reconoce que no puede garantizar su fiabilidad. El presidente de la división de noticias de la cadena, Andrew Heyward, dice en el texto que "sobre la base de lo que sabemos ahora, CBS no puede probar que los documentos son auténticos".
La CBS mostró el pasado día ocho en su programa "60 Minutes II" los documentos, supuestamente elaborados por el fallecido teniente coronel Jerry Killian, uno de los superiores del actual presidente en la Guardia Nacional Aérea de Texas en 1971, durante la guerra de Viertmam, en los que se asegura que el joven Bush no se sometió a los exámenes médicos periódicos exigidos a los pilotos de la Fuerza Aérea. También sugerían que tuvo un trato especial entre los militares por las conexiones políticas de su familia, ya que su padre era entonces congresista por Texas, y que Killian estaba bajo presión de sus superiores para cubrir las carencias del actual presidente.