LD (Agencias) Obama aceptará su condición definitiva de nominado el mismo día en el que se cumplirá el 45 aniversario del legendario discurso "Tengo un sueño", que pronunciara el fallecido reverendo Martin Luther King en el Lincoln Memorial de Washington DC en 1963.
Para entonces, la cúpula Demócrata en su totalidad -incluido el recién nombrado candidato a la Vicepresidencia, Joe Biden-, habrá expresado su adhesión por Obama. "Todo está diseñado", apuntan desde el New York Times, para una convención que en realidad se parece más a "una miniserie de cuatro noches de duración, con una audiencia potencial de más de 20 millones de personas".
No obstante, la Convención no está exenta de desafíos. El equipo de Obama tiene cuatro días para levantar la imagen de su candidato, de quien el Partido Republicano ha criticado en numerosas ocasiones su patriotismo y su capacidad de dirección. Pero sobre todo, el objetivo más importante de esta celebración será definir los términos de enfrentamiento entre los candidatos, el "cambio" de Obama frente al "más de lo mismo" representado por John McCain, que en septiembre asumirá finalmente su condición de candidato republicano en la Convención de Minneapolis.
"Existen dos imperativos estratégicos prioritarios en la Convención", explicó el encuestador demócrata y jefe de campaña del candidato demócrata en 2004, John Kerry, Mark Mellman. "Uno es hacer que la gente se ponga cómoda con Barack Obama, el otro es definir la carrera electoral con claridad, estableciendo a Obama como un factor de cambio, y a McCain como continuación de las políticas de Bush tanto a nivel nacional como en el extranjero", indicó. Para una de las principales estrategas de la campaña de Obama, Anita Dunn, "se trata de aclarar la idea de que las elecciones se realizarán entre dos candidatos y dos partidos políticos".
Tensiones
La Convención de Denver, con todo, ha sido programada como una fiesta. Cualquier tensión política ha sido resuelta con semanas de antelación para evitar trasladar una sensación de debilidad interna frente a la rotunda nominación de McCain. Sin embargo, según indica el conservador Wall Street Journal, algunos elementos cercanos a la senadora Hillary Clinton -la gran perdedora de las primarias demócratas- se encuentran "descontentos" con la forma en la que el equipo de Obama ha tratado a la senadora.
"No veo la alegría que suele darse tras unas primarias", declaró John Coale, un conocido abogado de Washington y mecenas de Clinton. "Obama es un tipo que quiere unir al mundo, pero que ha dividido al Partido Demócrata como nunca se había visto desde la Guerra de Vietnam", añadió.
Clinton, no obstante, hará de tripas corazón y hablará en favor de Obama en el evento principal del martes, bajo el eslogan "Renovando la promesa de América", y lo hará a sabiendas de que ésta será la última vez en mucho tiempo que su nombre se asocie con la Presidencia estadounidense, después de que algunos rumores tras las primarias la situaran como posible vicepresidenta del país. Con la nominación del senador Biden, su sueño se ha desvanecido.
Comparecientes
Se espera que el estadio llene a reventar desde el primer día, cuando la mujer de Obama, Michelle, salte a la palestra para comenzar la introducción del candidato como un hombre de familia y de valores. También se espera la aparición del cuñado del senador, el entrenador del equipo de baloncesto de la Universidad de Oregón, Craig Robinson, así como de la hermanastra del candidato, Maya Soetoro-Ng. Juntos, se encargarán de narrar la historia del senador, "una vida muy americana", como apunta uno de sus asesores al NY Times.
Periódicamente y entre comparecencias, varios "estadounidenses de toda condición" aparecerán ante las cámaras mostrando su apoyo por el candidato, junto con escenas sobre la vida privada del senador, rodadas por Davis Guggenheim -director del documental "Una Verdad Incómoda" sobre la actividad pro medioambiental del ex vicepresidente Al Gore-. En este sentido, la noche inicial consiste en subrayar "el viaje americano realizado por Obama" en su camino a la nominación presidencial, según Dunn.
En respuesta a las dudas republicanas sobre el trasfondo religioso de Obama, se prepara también un encuentro interconfesional, también para el lunes, al que acudirán desde el rabino Tsvi Weinreb, vicepresidente ejecutivo de la Unión de Congregaciones Judías Ortodoxas de América hasta la presidenta de la Sociedad Islámica de Norteamérica, Ingrid Mattson. Los católicos estarán representados por la monja Helen Prejean, a la que Susan Sarandon interpretó en el oscarizado film de Sean Penn, "Pena de Muerte".
A lo largo de los tres días siguientes, se espera que el "núcleo duro" del partido Demócrata suba al estrado para prestar su máximo apoyo a Barack Obama. Desde el ex presidente Jimmy Carter al ex presidente Bill Clinton, pasando por la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi y el líder demócrata en el Senado, Harry Reid; el senador por Vermont, Patrick Leahy; el propio John Kerry y el gobernador de Nuevo México, Bill Richardson.
Obama
Barack Obama se presentará ante los más de 70.000 asistentes al evento la noche del jueves, acompañado de su vicepresidente y precedido de un discurso de presentación de Al Gore. A pesar de la expectación, los organizadores han intentado hacer todo lo posible para que el discurso de aceptación de Obama transcurra en un entorno "íntimo", según el diario neoyorquino.
Se espera que el discurso de Obama suponga una de las mayores audiencias del año en televisión. En respuesta, la campaña de McCain emitirá una serie de anuncios durante la convención, y tiene previsto aparecer el lunes por la noche en el programa de variedades "Tonight with Jay Leno".