El jefe de la diplomacia gala hizo estas declaraciones minutos después de haber asegurado en una rueda de prensa que el edificio de la MINUSTAH había quedado derrumbado por el seísmo, sin que se supiera la suerte de las personas que lo ocupaban.
Ammin, de 65 años, encabezaba la misión de la ONU en Haití desde 2007, tras haber ocupado el cargo de secretario general adjunto de Naciones Unidas para operaciones de mantenimiento de la paz durante diez años.
Kouchner había indicado a la prensa que el edificio de la MINUSTAH, "con numerosos franceses en el interior, resultó afectado" sin que se tuviera conocimiento "de la suerte de las personas que allí estaban, incluido el responsable de la Misión".
El ministro francés destacó la confusión de las noticias que llegan desde el país, donde no hay conexión telefónica.
"En las próximas horas sabremos más", afirmó el jefe de la diplomacia francesa. El terremoto, de 7 grados en la escala de Richter, tuvo su epicentro a 1,5 kilómetros del centro de Puerto Príncipe, una ciudad de cuatro millones de habitantes en la que resultaron derribados la mayor parte de los edificios.
Kouchner indicó que la residencia oficial del presidente de Haití, Rene Preval, también resultó afectada, pero el jefe del Estado pudo salir de la misma y se puso en contacto con la Embajada francesa en la capital.