LD (EFE) Amenazadas por el embargo económico que Belgrado impondrá en caso de independencia, las empresas la provincia de Kosovo, con mayoría albanesa, están buscando nueva clientela para la venta de sus productos en Albania y otros países de la región balcánica.
Según fuentes kosovares, el embargo económico, el corte del suministro de energía eléctrica y el cierre de la frontera son algunas de las medidas del "plan de acción" que las autoridades de Serbia piensan a aplicar a Kosovo si esta provincia proclama unilateralmente la independencia a partir del 10 de diciembre.
El noventa por ciento de los productos consumidos en Kosovo son importados y su setenta por ciento llega sin aranceles de Serbia por proceder del mismo Estado. la provincia, la zona más pobre de los Balcanes, se encuentra bajo administración de las Naciones Unidas desde el 1999, cuando la OTAN puso fin a la guerra entre serbios y albano-kosovares.
Al otro lado de la frontera, Albania está trabajando para construir la mayor obra de infraestructura del país en su historia. Se trata de la llamada "carretera patriótica", que costará a los albaneses setecientos millones de euros, pero una vez terminada en 2009 culminará la ansiada unificación de los albaneses divididos por la frontera.