LD (Agencias) Según fuentes oficiales, la Secretaría del Gabinete busca endurecer la política de inspección del buque Man Gyong Bong-92, que tiene previsto arribar al puerto de Niigata el próximo 9 de junio tras un paréntesis de cinco meses motivado por la propagación en Asia de la neumonía atípica. La decisión llega después de que el pasado martes un desertor norcoreano declarara ante el Congreso de EEUU que un barco que transportaba bienes y pasajeros entre Japón y Corea del Norte había sido utilizado para el contrabando de componentes de misiles.
Por su parte, las autoridades japonesas de seguridad pública han argumentado que el barco fue también empleado para actividades de espionaje, y algunos residentes locales de Niigata se han manifestado para oponerse a la llegada del buque al puerto japonés. Los pasajeros que viajan en el Man Gyong Bong-92 son, principalmente, coreanos que residen de forma permanente en Japón y que simpatizan con el régimen estalinista de Pyongyang.
Según la Asociación General de Coreanos Residentes en Japón (Chongryon), relacionada con el país comunista, el barco suspendió sus operaciones el pasado mes de enero debido a la epidemia del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG).
Por su parte, las autoridades japonesas de seguridad pública han argumentado que el barco fue también empleado para actividades de espionaje, y algunos residentes locales de Niigata se han manifestado para oponerse a la llegada del buque al puerto japonés. Los pasajeros que viajan en el Man Gyong Bong-92 son, principalmente, coreanos que residen de forma permanente en Japón y que simpatizan con el régimen estalinista de Pyongyang.
Según la Asociación General de Coreanos Residentes en Japón (Chongryon), relacionada con el país comunista, el barco suspendió sus operaciones el pasado mes de enero debido a la epidemia del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG).