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Israel ofrece una tregua al Líbano si Hezbolá libera a los dos soldados secuestrados y se retira de la frontera

El gobierno israelí ha presentado al libanés, por mediación de Italia, una propuesta condicionada para el cese de operaciones militares israelíes en el Líbano. Según el ministro de Información libanés, Gazi al Aridi, esta propuesta tiene dos condiciones: que Hezbolá libere a los dos soldados israelíes capturados el pasado miércoles y que retire a sus terroristas hasta el norte del río Litani, por encima de las Granjas de Cheba, en el sureste del Líbano. Este domingo varios misiles tipo Katiusha lanzados por los terroristas de Hezbolá alcanzaron Haifa, la tercera ciudad de Israel, matando al menos ocho personas. Israel cree que los misiles fueron facilitados por Siria, país que ha amenazado con una respuesta "sin limitaciones" si es atacada.

L D (EFE) La proposición se produce en medio de un clima de extrema tensión, después de que el Líbano acusó al Consejo de Seguridad de la ONU de "buscar una rendición", mientras que Siria advirtió de que su respuesta a una agresión israelí "no tendrá limitaciones ni en el tiempo ni en los medios".
 
En una rueda de prensa celebrada tras la reunión del gobierno libanés al Aridi no detalló si el gobierno había aceptado o negado las condiciones impuestas por el primer ministro israelí, Ehud Olmert. Según el ministro libanés, esta propuesta israelí ha sido planteada por el primer ministro italiano, Romano Prodi, en una conversación telefónica con su homólogo libanés Fuad Siniora.

El minisotro del país de los cedros hizo hincapié en que no se había "entrado en la etapa de las negociaciones" y que estaban esperando que la ONU tome una postura respecto a la situación. "El primer ministro Fuad Siniora recibió una llamada telefónica del primer ministro italiano en la que le dijo que el primer ministro israelí puso dos condiciones para aceptar un alto el fuego", dijo el ministro libanés de Información.

 
Sin embargo, el ministro israelí de Defensa, Amir Peretz, después de informar del amplio respaldo que la intervención en El Líbano tiene del pueblo israelí, dijo que Israel continuará con su campaña en el Líbano hasta cambiar la realidad. "Pensamos actuar con el mensaje que hemos recibido de la población israelí, que es que si la campaña ha empezado, tenemos que terminarla", afirmó Peretz en una rueda de prensa ofrecida en el Consejo Municipal de Haifa. También agregó que la ofensiva lanzada por el Ejército israelí contra el Líbano está destinada "a cambiar la realidad... para que no vuelva a haber una situación en la cual la retaguardia y la población quede amenazada".
 
El titular de Defensa y líder del Partido Laborista israelí afirmó que su país "se encuentra en una encrucijada decisiva, que requiere una decisión determinante". Dijo asimismo que "las organizaciones terroristas se figuran que la debilidad de Israel está en la retaguardia, y creían que no había en Israel un gobierno con la capacidad de reaccionar". Exhortó a los familiares de las víctimas de los recientes ataques de los terroristas de Hezbolá a "que no piensen que su pérdida ha sido en balde, porque por cada víctima pagarán caro". Subrayó que Hezbolá "está muy sorprendida de que hayamos atacado los centros urbanos donde esconden sus misiles" en el Líbano, y afirmó que "se han sorprendido de que tengamos el valor de atacar el centro neurálgico de la organización, algo que nunca habíamos hecho".

También tuvo palabras para los difíciles momentos que vive la población israelí y afirmó que el Gobierno "se siente respaldado, y Hezbolá ve en esto un frente unido porque no ven salir a la ciudadanía a las calles para manifestarse en contra del Ejecutivo". Apeló a la "resistencia y unidad" del pueblo israelí, armas que dijo "son nuestra garantía para el éxito de la campaña".

 
Hezbolá ataca Haifa y mata al menos ocho personas
 
A primera hora de este domingo, el grupo terrorista chií Hezbolá ha disparado  misiles desde el Líbano contra la ciudad de Haifa, en el norte de Israel, causando la muerte al menos a ocho personas e hiriendo a varias docenas, según fuentes médicas citadas por la radio pública israelí. Los cohetes han hecho blanco en la parte baja de la ciudad ubicada en una loma del monte Carmelo y que con 250.000 habitantes es la tercera más importante de Israel. Además, la localidad alberga una numerosa población de origen árabe. Mediante un comunicado, Hezbolá ha amenazado con atacar instalaciones petroquímicas de Israel.
 
La policía de Israel ha pedido a los conductores que abandonaron los vehículos precipitadamente para protegerse en lugares seguros durante la caída de los proyectiles que se los lleven del lugar para puedan acceder a la zona los equipos de rescate. La llamada comandancia de la retaguardia, responsable de los civiles en un escenario bélico, llamó a los habitantes de Haifa, y a los de su planta suburbana en Hakrayot, San Juan de Acre y Tirat Hacarmel a entrar en las habitaciones de seguridad.
 
 
El jefe de la Policía israelí, Moshé Karadi, manifestó que se incrementará la presencia de fuerzas de seguridad en el norte del país para garantizar a sus habitantes seguir llevando una vida normal. El alcalde de Haifa, Yona Yahav, dijo por su parte, que "en línea con las recomendaciones de la Comandancia de la Retaguardia, hemos cancelado todos los campamentos de verano y eventos culturales en la ciudad".
 
En las demás localidades en las que escuchen las alarmas antiaéreas los habitantes deberán buscar refugio y seguir las noticias de los medios de comunicación. Con este ataque, el más sangriento desde que comenzaron los disparos de cohetes Katyusha contra Israel, el numero de muertos por estos proyectiles en el norte del país asciende a doce.
 
Esta misma comandancia también informó de que debido a la continuación de los ataques con cohetes desde el Líbano, los habitantes de Tel Aviv, la ciudad más poblada de Israel, deben aumentar la protección. El Ejército recuerda que cuando suenen las sirenas antiaéreas los habitantes de la zona deben entrar en espacios protegidos o una habitación interior lejos de las ventanas. La distancia entre Tel Aviv y la frontera con Líbano es de unos 140 kilómetros y los servicios de inteligencia militar israelíes aseguran que Hizbulá cuenta con varias decenas de cohetes con un alcance de entre 100 y 200 kilómetros, fabricados en Irán. Asimismo, las autoridades israelíes han restringido el servicio de trenes desde Benyamina hacia el sur del país.
 
El grupo terrorista Hezbolá ha informado de que ha disparado cohetes RAD-2 y RAD-3 en respuesta a los ataques aéreos israelíes en el Líbano. Además, ha amenazado con atacar las instalaciones petroquímicas de Haifa en su próximo ataque contra esta ciudad.  Mediante un comunicado leído en la cadena de televisión "Al Manar", los terroristas han asegurado que en el primer ataque de este domingo contra Haifa han decidido excluir estas instalaciones. "Pero ante cualquier nueva estupidez de los israelíes sionistas, atacaremos las instalaciones petroquímicas de Haifa (...), así como sus zonas aledañas".
 
Siria amenza y el gobierno israelí le acusa de proporcionar armas a Hezbolá
 
Siria ha amenazado con repeler cualquier agresión de Israel con una respuesta "que no tendrá limitaciones ni en el tiempo ni en los medios", según el ministro de Información, Mohsen Bilal. El ministro sirio dijo que ese eventual ataque "se encontrará con una réplica firme y directa" por parte del gobierno sirio, según la declaración transmitida por la agencia siria SANA.

Desde que comenzaron los ataques de Israel contra el Líbano hace cinco días, esta es la primera vez que el gobierno sirio se pronuncia oficialmente sobre esta crisis y sus posibles consecuencias en Siria. Israel ha acusado a Siria de ser la última responsable de la captura de los dos soldados por parte del movimiento chií libanés Hizbulá, y teme que Hizbulá los haya trasladado o intente trasladarlos a territorio sirio, por lo que está inutilizando los aeropuertos y carreteras libanesas.

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, tuvo el pasado miércoles palabras contundentes hacia Siria: "Es un gobierno que apoya y alienta actividades asesinas de organizaciones terroristas, tanto dentro de sus fronteras como fuera de ellas. Naturalmente, se están llevando a cabo preparativos para tomar las medidas apropiadas", afirmó. Sin embargo, el jefe de operaciones del Ejército israelí, general Gadi Azincot, aseguró ayer que "Siria no es un objetivo de nuestras operaciones".

 
Pero este domingo, el Gobierno israelí ha informado que los cohetes que alcanzaron la localidad de Haifa y mataron a ocho personas son de fabricación siria. El ministro de Transporte y ex ministro de Defensa, Shaul Mofaz, acusó, tras la reunión semanal del consejo de ministros, a Siria de "cerrar los ojos" a lo que pasa en la frontera libanesa con Israel y proporcionar armas a Hezbolá, "según vemos las armas que fueron disparadas hoy" contra Haifa.

Se trata de la primera vinculación directa de Siria con la violencia que se ha registrado desde el pasado miércoles en el norte de Israel. Hasta el momento, oficiales del Ejército israelí habían informado estos últimos días que Siria intentaba mantenerse al margen de los ataques y que era la organización terrorista libanesa Hezbolá la que buscaba la participación de Damasco. Asimismo, Mofaz arremetió también contra Irán. "Los que están implicados en todo lo que hace Hezbolá en el Líbano son los iraníes. Les dan armas, les dan dinero y les alimentan ideológicamente", dijo. "Hezbolá es el enviado de Irán, en la frontera norte de Israel", agregó.

Mofaz dijo que "Hezbolá es Al Qaeda y (su máximo dirigente) Hasan Nasralá es Ben Laden y por tanto estamos actuando como estamos actuando y hay que seguir actuando con determinación". "Tenemos que actuar así para que al final Hezbolá sepa que Israel está determinado a defender sus ciudadanos y no permitirá esta realidad", agregó. Asimismo, llamó al primer ministro libanés, Fuad Siniora, a desplegar su Ejército en el sur de Líbano y "nadie le molestará". Mofaz expresó su apoyo a los ataques israelíes contra la infraestructura de Hezbolá y en particular contra el barrio de Dahia, "la capital de Hezbolá".

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