LD (EFE) Este domingo en el norte de israelí las sirenas de alarma no cesaron de sonar casi durante dos horas para advertir a la población sobre un ataque con cohetes de Hezbolá. La radio pública ha estado interrumpiendo constantemente sus transmisiones para anunciar los partes del Comando de la Defensa Civil llamando a la gente a protegerse en los refugios antiaéreos. Poco después se conocía que un civil moría y otros siete están heridos después de que impactaran 77 cohetes en las localidades de Kiriat Shmoná, Safed y Haifa. También ha sido bombardeado el macizo del Golán donde hay 33 colonias judías.
En el otro lado de la frontera, los últimos bombardeos israelíes, según ha informado la radioemisora La Voz del Líbano, han matado a cinco personas -una madre, sus tres hijos y una empleada de hogar ceilanesa- cuando un misil impactó sobre el edificio de cuatro plantas en el que residían en la localidad de Burj Chemali, cerca de Tiro.
Además, dos palestinos resultaron heridos en una gasolinera alcanzada por las bombas israelíes, también en Burj Chemali, en la entrada este de la ciudad de Tiro, donde se produjo un incendio que amenaza un hospital y un centro comercial. Otros dos palestinos resultaron también heridos en un ataque aéreo israelí contra el campamento de refugiados palestinos de Ain el Helu, el mas grande de los doce que hay en el Líbano, situado en las afueras de Sidón.
La aviación israelí tomó como blanco asimismo la región de Nabatieh (sur), donde se cree que hay heridos en Kfar Ruman, añadió la emisora. En el valle oriental de la Beká, dos civiles perdieron la vida y otros diez resultaron heridos en la aldea de Ali an Nahri, en la región de Baalbeck, donde la aviación israelí disparó contra una casa y un centro de culto chii.
Aviones militares israelíes atacaron también un vehículo todoterreno del Ejército libanés, y dos de sus ocupantes resultaron heridos en Aita Fajar, también en el sur. En la región norteña de Akaar, Israel bombardeó tres puentes, algunos de ellos ya dañados en ataques anteriores, ataque que causó heridas al menos a siete personas. Los aparatos israelíes atacaron también la ciudad de Halba donde destruyeron varios edificios y un puesto del Ejército, sin que se sepa hasta el momento si hubo víctimas.
Paralelamente a los bombardeos aéreos, Israel sigue adelante con su ofensiva terrestre, que se concentró sobre Jiam donde concentró el fuego de artillería y donde sus tropas encuentran una férrea resistencia de Hezbolá, que anunció que había destruido un carro de combate israelí.