LD (Agencias) El Gobierno de Israel y la ANP han acordado integrar tres comités especiales para dirimir sus divergencias, entre ellos uno relacionado con los problemas en torno a la liberación de los prisioneros palestinos, cuyo número se eleva a más de ocho mil.
La creación de esos comités mixtos será el segundo anuncio de importancia que harán el primer ministro de Israel y el presidente de la ANP, Ariel Sharon, y Abú Mazen, respectivamente, en la cumbre de Sharm el-Sheik. Según lo prometido por el Gobierno israelí, después de la cumbre recuperarán su libertad quinientos "presos de seguridad" palestinos, y dentro de tres meses otros cuatrocientos.
Otra de las comisiones tratará asuntos que conciernen a la retirada del Ejército israelí de cinco ciudades palestinas autónomas de Cisjordania, según un anuncio de Israel como "gesto de buena voluntad" con el presidente Mazen. La primera transferencia, según fuentes israelíes, se llevará a cabo en la localidad de Jericó, con unos veinte mil habitantes, situada junto al Mar Muerto, a treinta kilómetros al sureste de Jerusalén. A esa ciudad le seguirán Kalkilia, Tulkarem, Belén y Ramala, esta última sede de la ANP y del Parlamento palestino. Jenín y Naplusa, en Cisjordania septentrional, seguirán bajo control israelí "a petición de las autoridades palestinas", según fuentes militares.
En las negociaciones directas que ya han comenzado, según fuentes diplomáticas israelíes, Sharon exigirá a Abú Mazen "actos, no palabras" en la lucha contra los grupos terroristas palestinos. El primer ministro se comprometerá a detener las operaciones militares si los cuerpos de seguridad de la ANP logran poner fin a los atentados. Además, reitera el compromiso de su Gobierno con los planteamientos de la "Hoja de ruta", el plan de paz diseñado por el llamado "Cuarteto de Madrid" (EEUU, Rusia, ONU y la UE).