LD (EFE) En declaraciones a la radioemisora de las Fuerzas Armadas de Israel, el viceministro israelí de Defensa, el general en la reserva Matán Vilnaí, declaró que los israelíes se desconectarán de Gaza, después de que terroristas palestinos derribaran este miércoles la empalizada fronteriza con Egipto.
Vilnaí dijo que "el esfuerzo (de Israel) para desconectarse de Gaza" -que empezó en agosto de 2005 con la evacuación de los asentamientos judíos- "continuará pues queremos dejar de proporcionarles (a sus residentes palestinos) electricidad, agua potable y medicinas, que tendrán que recibir de otras fuentes".
De momento, el Gobierno del primer ministro israelí, Ehud Olmert, no ha debatido esa medida. A pesar de los obstáculos y la situación en Gaza, indicó, "continuaré con todas mis fuerzas negociando (la paz) con el presidente palestino, Abú Mazen".
En una consulta con oficiales superiores de las Fuerzas Armadas, Vilnaí decidió mantener cerrados los cinco pasos fronterizos con Gaza y cortadas las relaciones económicas con ese territorio. No obstante, continuará este jueves el abastecimiento de fuel y gas "por razones humanitarias" para la planta palestina de electricidad y los generadores de hospitales, así como de gasolina para ambulancias y los vehículos de la Agencia de la ONU de ayuda a los refugiados palestinos (UNWRA), un 70 por ciento de la población.