LD (EFE) Al comentar el último informe de la AIEA sobre el programa nuclear de Irán –desfavorable para el régimen de Teherán–, el asesor del Organismo iraní de Energía Atómica, Mohamad Saidi, ha condicionado su plena cooperación a que la crisis sea retirado de la agenda del Consejo de Seguridad de la ONU.
Saidi dijo que "Teherán está dispuesto a cooperar de forma completa para resolver las cuestiones pendientes según sus obligaciones internacionales a condición de que el caso nuclear sea devuelto (del Consejo de Seguridad de la ONU) a la AIEA". Reiteró que el programa atómico iraní "es pacífico", y que el informe de la agencia muestra que "no ha sido desviado", y que los inspectores internacionales "han conseguido acceder a las instalaciones nucleares iraníes".
El asesor nuclear defendió la suspensión por su país hace más de un año de la aplicación del protocolo adicional del Tratado de no Proliferación, y responsabilizó de esta medida a los países "que patrocinaron las resoluciones en el Consejo de Seguridad contra Irán". Aludía Saidi a los cinco miembros permanentes del Consejo más Alemania que exigen que Teherán suspenda sus actividades de enriquecimiento de uranio, lo que rechaza Irán al considerar que "enriquecimiento es un derecho legal iraní".
Subrayó que "si esos países hubieran adoptado el diálogo y tratado el caso (nuclear) de forma lógica y legal, Irán no hubiera suspendido" el protocolo adicional, que permite inspecciones sin aviso previo en cualquier instalación.