LD (Agencias) Tras una conferencia de prensa en Shanghai al concluir una reunión con el presidente chino Hu-Jintao, Mauhumud Ahmadineyad declaró que el paquete de incentivos destinado a que Teherán detenga su programa de enriquecimiento de uranio es "un paso adelante" para resolver la disputa sobre su polémico programa nuclear.
El mandatario destacó que "en general, consideramos esta oferta como un paso adelante y he dado instrucciones a mis colegas para que la consideren cuidadosamente". Esas declaraciones suponen el indicativo de más alto nivel de que el país está dispuesto a negociar sobre el paquete de incentivos propuesto por EEUU, Rusia, China, Reino Unido, Francia y Alemania.
Enseguida, Ahmadineyad exigió que las sanciones "no deberían ser usadas para humillar e imponer su visión (de Occidente) a otros países del mundo" y recordó que "es responsabilidad de todos cambiar el discurso mundial, basado en la intimidación".
Ahmadineyad no quiso adelantar la postura iraní sobre la oferta de los cinco países del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania (5+1) para volver a las negociaciones, limitándose a señalar que supone "un paso adelante" en la resolución del conflicto. El líder iraní tampoco reveló detalles de su reunión con el presidente Hu.
El presidente de Irán, en el punto de mira de la comunidad internacional debido al interés de Teherán en desarrollar un programa nuclear, acude por primera vez este año a una cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), de la que su país es miembro observador.