L D (EFE) El ministro de Justicia, Fausto Alvarado, declaró en una nota de prensa que la orden de captura es un paso importante para los esfuerzos del Perú por lograr que Fujimori responda ante la justicia peruana por los delitos de homicidio calificado, lesiones graves y desaparición forzada. El ex gobernante peruano (1990-2000) tiene una orden de extradición a raíz de las acusaciones por la muerte de 25 personas en las matanzas de Barrios Altos y La Cantuta, perpetradas en 1991 y 1992, respectivamente, por el grupo paramilitar Colina.
La Oficina del Consejo Legal de la Secretaría General de la Interpol confirmó a Alvarado la orden internacional después de que absolviera sus dudas sobre la petición de extradición con las autoridades judiciales y gubernamentales peruanas. El ministro peruano expresó su satisfacción porque las autoridades judiciales contestaron de manera idónea los requisitos planteados por la Interpol para proceder a la detención internacional de Fujimori, refugiado en Japón desde fines de 2000.
Hasta la semana pasada, Alemania, Costa Rica, Italia, Suiza y España habían confirmado su intención de detener preventivamente a Fujimori si ingresaba a su territorio. Sin embargo, Tokio todavía no se ha pronunciado sobre una eventual detención de Fujimori hasta que reciba el cuadernillo de extradición, cuya traducción al japonés concluirá a mediados de año.
La Oficina del Consejo Legal de la Secretaría General de la Interpol confirmó a Alvarado la orden internacional después de que absolviera sus dudas sobre la petición de extradición con las autoridades judiciales y gubernamentales peruanas. El ministro peruano expresó su satisfacción porque las autoridades judiciales contestaron de manera idónea los requisitos planteados por la Interpol para proceder a la detención internacional de Fujimori, refugiado en Japón desde fines de 2000.
Hasta la semana pasada, Alemania, Costa Rica, Italia, Suiza y España habían confirmado su intención de detener preventivamente a Fujimori si ingresaba a su territorio. Sin embargo, Tokio todavía no se ha pronunciado sobre una eventual detención de Fujimori hasta que reciba el cuadernillo de extradición, cuya traducción al japonés concluirá a mediados de año.