L D (EFE) Los ministros de Exteriores que negocian la primera Constitución europea se reunieron este lunes en Bruselas para debatir el ejercicio de las presidencias, la eliminación de los vetos y la inclusión o no de una referencia al Cristianismo. El número de delegaciones que pide una referencia explícita a los valores cristianos dentro del preámbulo de la futura Constitución europea se sitúa ya en siete y podría ir en aumento.
La mayoría de los Estados que intervinieron este lunes en la Conferencia Intergubernamental (CIG) ha pedido "dar marcha atrás" y no proceder a una amplia extensión de la mayoría cualificada (como propuso la Convención), es decir, restablecer el veto en ámbitos como el fiscal (Reino Unido e Irlanda) o en cuestiones penales (Holanda y Gran Bretaña). También Austria y Dinamarca se sumaron a los llamamientos para que el Consejo de Ministros de la Unión Europea decida por unanimidad las cuestiones de seguridad social, precisaron fuentes del Consejo de la Unión. Algunos países, no obstante, se pronunciaron a favor de una extensión de la mayoría cualificada.
Un grupo de seis delegaciones quiere ir más lejos en materia de política exterior y de seguridad común, de fiscalidad (Francia, por ejemplo), medio ambiente, asuntos sociales o justicia e interior. Algunas delegaciones afirmaron que estarían dispuestas a aceptar la mayoría cualificada en la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) siempre y cuando la iniciativa parta de la Comisión Europea o del futuro ministro de Asuntos Exteriores, informaron fuentes del Consejo de la UE.
Los ministros de Economía quieren volver al veto
Los ministros de Exteriores analizarán también la propuesta de sus colegas de Finanzas de al menos cinco países, que han pedido volver atrás respecto al Tratado de Niza y reintroducir el derecho de veto en la aprobación del marco presupuestario plurianual después de 2013. En cuanto a esta polémica propuesta, la ministra española, Ana Palacio, dijo que "España no la ha hecho suya como petición a la Conferencia intergubernamental", pero aseguró que la respeta "como cualquier asunto que esté sobre la mesa"
"Los ministros Ecofín (de Economía y Finanzas) tienen una enorme importancia, pero no son la conferencia intergubernamental", subrayó. Según Palacio, "en estos momentos esas propuestas ya no son propuestas de los ministros Ecofín sino de varios Estados miembros". El pasado viernes, la Comisión Europea, que participa en la CIG como observadora, denunció el intento de algunos Gobiernos de "reintroducir el veto" en algunos ámbitos y de restar poderes al Parlamento Europeo.
Equipos de subsecretarios
Por otro lado, la presidencia italiana de la UE ha vuelto a presentar a sus socios comunitarios su propuesta de crear "equipos presidenciales" de los Consejos de Ministros, formados por 3 ó 4 países, para períodos de 12, 18 ó 24 meses, algo que está aún por determinar. Estos equipos prepararían el trabajo antes de los Consejos de Ministros de la Unión, a excepción del Consejo de Asuntos Generales –que gestiona los asuntos globales de la UE y prepara las cumbres europeas–, que pasaría a ser presidido por el futuro presidente del Consejo de la UE.
Mientras, la delegación del Parlamento Europeo reclamó que se reabra el debate sobre la creación de un Consejo Legislativo, que sería una especie de segunda Cámara de la Unión Europea, aunque la mayoría de los gobiernos se opone.