L D (Europa Press) El vuelo IB 3251, que partió de Amsterdam a las 16:05 horas del pasado viernes con destino a Madrid con 156 pasajeros a bordo, hubo de regresar a la capital holandesa después de que uno de los pasajeros, Rafael Lasfuentes Villar, vecino de Soria de 32 años, amenazara supuestamente con hacer estallar un artefacto si el avión, un Airbus A320, no aterrizaba de nuevo en el aeropuerto de Amsterdam-Schiphol.
Tras tener conocimiento de la presunta amenaza lanzada por el pasajero, el comandante del vuelo regresó al aeropuerto, donde, siguiendo con el procedimiento de seguridad previsto, todos los pasajeros fueron desalojados por las rampas.
La Policía holandesa procedió entonces a la detención del empresario, así como de otros cuatro compañeros de viaje también de nacionalidad española, al tiempo que inspeccionaba el aparato en busca del supuesto artefacto explosivo. Los cuatro españoles fueron puestos en libertad sin cargos después de que se les tomara declaración, mientras que Lasfuentes ha permanecido detenido desde entonces. La Justicia holandesa había decidido este lunes prorrogar durante dos semanas su detención.
Según la defensa del acusado, citado por la agencia ANP, el empresario le dijo en castellano a la pasajera que iba a su lado "vamos a volar", mientras que ésta creyó entender que que Lasfuentes se estaba preparando para hacer explotar el aparato