Colombia tiene dos cánceres muy violentos: Las Farc y el vecino Chávez. A la violencia hay que combatirla con violencia, nada de palabritas bonitas. ¿Se hubiera derrocado a Hitler sólo con palabritas? Si esperamos que caiga por su peso, tendríamos el ejemplo de la Unión Soviética, 75 años de miseria comunista. Si a un chorizo, como Chávez, no les plantas cara, incluso saca pecho.