LD (Agencias) Los terroristas de "Las brigadas de Azedín al-Kasem", brazo de Hamas, han emitido un comunicado de prensa en la que dan un ultimátum de dos días para que Al-Fatah desocupe sus cuarteles y oficinas que aún mantiene en la franja de Gaza. Las fuerzas leales a la ANP tendrían que entregar sus armas antes de las siete de la tarde del próximo viernes.
En la ciudad cisjordana de Naplusa, las terroristas "Brigadas de los Mártires de al-Aqsa", vinculadas a Al-Fatah, han dado un plazo de doce horas a Hamas para cesar los ataques en la franja de Gaza, caso contrario, tomarán represalias.
Hamas insiste en que continuará "hasta el final" para acabar con las fuerzas leales a Al-Fatah en la franja de Gaza, a las que acusó de ser "soldados colaboradores" con el enemigo, en alusión a Israel. Según fuentes médicas, el último balance de muertos durante la jornada es de doce, con la muerte de un menor, un civil y un policía. Con ellos, aumentan a 58 las víctimas mortales desde el pasado domingo.
Batalla de Yebalia
Horas antes, el jefe del servicio de emergencia del Ministerio de Sanidad de la Autoridad Nacional Palestina, Moaweya Hasanein, confirmaba que la bautizada "Batalla de Yebalia", al este del campo de refugiados del mismo nombre, ha dejado veintiún palestinos muertos. Los servicios hospitalarios reportaron sesenta heridos por el combate entre doscientos terroristas de Hamas y quinientos efectivos de los organismos de seguridad, leales a Al-Fatah.
En medio de un intenso tiroteo, Hamas tomó el cuartel general de los organismos de seguridad de la ANP. En las últimas horas, la ofensiva de los "Batallones de Azedín al-Kasem" –aparentemente sin un comando central unificado que guíe las acciones– está siendo dirigida contra los cuarteles y oficinas de Al-Fatah ubicados en el centro de la franja de Gaza, territorio autónomo con 1,5 millones de habitantes.
Al sur, los enfrentamientos tienen lugar en la ciudad de Jan-Yunes, donde Hamas ocupó el hospital. Según fuentes oficiales, en todos los frentes Al-Fatah, la Policía y los "Batallones de Azedín al-Kasem" están actuando "a la defensiva" al carecer de un comando central que los guíe y sujetos a jefes locales.
En la ofensiva para tomar el control de Gaza, Hamas ha tomado un estratégico puesto de control desde donde Al-Fatah podía dominar el tráfico en la carretera de Saladino, la principal de la franja. La vital vía, cerrada habitualmente por el Ejército israelí para dividir la franja de Gaza durante la ocupación, une el norte del territorio con el sur.
Elecciones anticipadas
La grave situación, calificada ya de "guerra civil", mantiene la franja de Gaza sin Gobierno. La alianza gubernamental a cargo del primer ministro Ismail Haniye, de Hamas, quedó semi-paralizado al decidir Al-Fatah, con la anuencia de Abú Mazen, retirar a sus ministros hasta que cese la violencia que paulatinamente se extendía también, por medio de varios incidentes, a Cisjordania.
La grave situación, calificada ya de "guerra civil", mantiene la franja de Gaza sin Gobierno. La alianza gubernamental a cargo del primer ministro Ismail Haniye, de Hamas, quedó semi-paralizado al decidir Al-Fatah, con la anuencia de Abú Mazen, retirar a sus ministros hasta que cese la violencia que paulatinamente se extendía también, por medio de varios incidentes, a Cisjordania.
Así, un grupo de legisladores de Al-Fatah pidieron a Abú Mazen que decretase el estado de emergencia y convocase nuevas elecciones en Gaza, Cisjordania y Jerusalén este. Los últimos comicios, celebrados en enero del año pasado, fueron ganados por los candidatos de Hamas.
En medio del enfrentamiento, una delegación del Gobierno de Egipto mantiene consultas y contactos con los dirigentes de ambas partes para tratar de forzar un urgente alto el fuego. Tanto Mazen en su sede de la ciudad cisjordana de Ramala como Haniye, residente en el campo de refugiados de Shati, al oeste de la ciudad de Gaza, llamaron el martes a un alto el fuego pero, de momento, eran desoídos por sus respectivas fuerzas en el terreno.