LD (Agencias) La Convención Republicana que elegirá al presidente George Bush como candidato a las elecciones generales del próximo dos de noviembre en EEUU se inició este lunes en Nueva York con duras críticas al candidato demócrata, John Kerry y con constantes evocaciones al 11-S y la guerra en Irak y contra el terrorismo. Muchos delegados republicanos lucieron tiritas adornadas con un corazón púrpura, una parodia a las medallas "Purple Heart" (corazón púrpura) que Kerry obtuvo a finales de los años sesenta cuando sirvió en la guerra de Vietnam.
En medio de un ambiente de elevada exaltación patriótica y militar, con numerosos delegados portando pancartas en apoyo de las tropas estadounidenses en Irak e innumerables banderas tricolores, el presidente de la Cámara de Representantes, Dennis Hastert criticó la posición de Kerry respecto a la guerra en Irak. Recordó que el senador por Massachusetts "primero votó a favor de la guerra y después lo hizo en contra". Al hacer una comparación, destacó que Bush es un líder fuerte que "sí tiene la visión apropiada para EEUU".
En la primera jornada, las 32 delegaciones programadas para votar su candidato a la presidencia eligieron, como estaba previsto, a viva voz a George Bush para la reelección. Siguiendo las normas del partido, la lista se inició por orden alfabético -la primera delegación en expresarse fue la de Alabama- y terminó con Nueva Hampshire.
La primera jornada incluyó homenajes a los dos ex presidentes republicanos todavía vivos. El primero fue para el ex presidente George Bush y su esposa Barbara, mientras que el segundo le correspondió a Gerald Ford que, con 91 años de edad, no asistió debido a su delicado estado de salud. La sesión del lunes fue cerrada por dos de los hombres más admirados del Partido Republicano, el senador John McCain y el ex alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani.
McCain -que en 2000 disputó a Bush la candidatura republicana- defendió las políticas del presidente especialmente en referencia a la guerra en Irak y le agradeció "el haber hecho este mundo un lugar más seguro" con su lucha contra el terrorismo. Añadió que "nuestra elección no era entre un estatus quo benigno y el derramamiento de sangre de una guerra. Era entre la guerra y una amenaza más seria. No permitáis que nadie diga lo contrario. Ni nuestros críticos en el extranjero ni nuestros oponentes políticos".
Por su parte, Giuliani alabó el liderazgo de Bush al recordar que durante los ataques del 11-S se expresó con un "gracias a Dios que tenemos al presidente Bush. Necesitamos a George Bush más que nunca". También atacó a Kerry por su voto en contra de la primera guerra del Golfo y su oposición a la invasión de Irak en 2003 pese a votar en su favor en el Senado. En ese sentido, afirmó que "los contrastes entre las posturas de Kerry son dramáticas, porque implican formas totalmente distintas de enfrentarse con el terrorismo".