L D (EFE) Los dos presidentes "reiteraron su compromiso para trabajar conjuntamente hacia una península (coreana) libre de armas nucleares a la vez que expresaron su preocupación sobre Corea del Norte", añadió McClellan en una conferencia de prensa.
El programa nuclear norcoreano volvió a la actualidad en los últimos días después de que ese país ensayó un misil el pasado domingo, y tras diversas informaciones acerca de la posibilidad de que el régimen de Pyongyang pueda realizar un ensayo nuclear. En los últimos días, varios gobiernos del este de Asia, como el surcoreano, han manifestado su preocupación ante la posible inminencia de un ensayo atómico en Corea del Norte.
Bush y el presidente chino, según la Casa Blanca, recalcaron también la importancia de las "conversaciones a seis" activadas en agosto de 2003 para intentar que Pyongyang renunciara a su programa atómico y volviera al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares que abandonó a finales de 2002. Corea del Norte boicoteó en septiembre de 2004 la que debería haber sido la cuarta ronda de esas conversaciones a seis bandas entre ambas Coreas, Japón, China, Rusia y Estados Unidos. Los dos presidentes, junto con el de Rusia y el de Corea del Sur, coincidirán en Moscú la próxima semana durante las conmemoraciones por el 60 aniversario del final de la II Guerra Mundial, y se espera que continúen en la capital rusa los contactos sobre el problema del programa atómico norcoreano.
Bush y el presidente chino, según la Casa Blanca, recalcaron también la importancia de las "conversaciones a seis" activadas en agosto de 2003 para intentar que Pyongyang renunciara a su programa atómico y volviera al Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares que abandonó a finales de 2002. Corea del Norte boicoteó en septiembre de 2004 la que debería haber sido la cuarta ronda de esas conversaciones a seis bandas entre ambas Coreas, Japón, China, Rusia y Estados Unidos. Los dos presidentes, junto con el de Rusia y el de Corea del Sur, coincidirán en Moscú la próxima semana durante las conmemoraciones por el 60 aniversario del final de la II Guerra Mundial, y se espera que continúen en la capital rusa los contactos sobre el problema del programa atómico norcoreano.
Bush y Hu hablaron también sobre las visitas a territorio chino de dirigentes de la oposición política de Taiwán, que han supuesto la apertura de un nuevo capítulo entre las complicadas relaciones entre Pekín y Taipei, a tenor de la información oficial estadounidense. En este sentido, el presidente estadounidense "urgió a Hu a continuar trabajando en formas de tender la mano al presidente (taiwanés) Chen (Shui-bian) como líder legítimo de Taiwán", añadió el portavoz de la Casa Blanca. Además, los dos presidentes hablaron sobre cuestiones comerciales y económicas, que McClellan no precisó, pero que probablemente se referían a las repetidas peticiones de EEUU para que China deje flotar libremente a su divisa y no la fije artificialmente al dólar, lo que favorece a las exportaciones chinas.