Las fuerzas leales a Muamar Gadafi se han hecho con el control del puerto de Misrata, en el oeste del país, dejando varados a miles de trabajadores extranjeros que buscaban ser evacuados, según ha informado un residente.
Según esta fuente, los bombardeos de la coalición internacional durante la noche del miércoles alcanzaron algunos de los tanques que las fuerzas gubernamentales tienen en las proximidades de esta ciudad pero no los que se encuentran en el centro de la misma.
Los bombardeos de los últimos días no han conseguido detener los ataques y las operaciones de francotiradores de las fuerzas de Gadafi que, según los residentes, han matado a decenas de personas y herido a cientos en Misrata, el último bastión rebelde en el oeste de Libia.
"Algunos tanques en la carretera costera fueron bombardeados anoche hacia las 18:00 horas pero los tanques dentro de la ciudad, en el centro (...) que estuvieron bombardeando la ciudad, siguen ahí y no fueron atacados", ha relatado este residente, Abdelbasset.
"Tenemos una crisis humanitaria en el puerto. Hay más de 6.000 trabajadores egipcios, algunos con sus familias, más algunos trabajadores africanos, que están ahora en el puerto. Fueron allí para esperar a un barco que les sacara pero nadie llega", ha añadido.
"Desde el miércoles, el puerto está bajo el control de las fuerzas pro Gadafi. Han enviado dos buques de guerra y algunos botes y ahora nos tienen asediados desde el mar", ha lamentado Abdelbasset. "No nos han atacado, pero si lo hacen, los miles de trabajadores serán las primeras víctimas", ha advertido.
Misrata, la tercera mayor ciudad del país con unos 300.000 habitantes, se encuentra a unos 200 kilómetros al este de Trípoli.
Contradicción en el número de muertos y civiles
La agencia estatal de noticias libia, JANA, ha afirmado que la coalición internacional efectuó la noche del miércoles tres ataques contra el distrito de Tajura, en Trípoli, que causaron la muerte de "un gran número" de civiles.
La misma fuente aseguró que el objetivo del tercer ataque fueron "los servicios de rescate que intentaban retirar a los cadáveres y a los heridos de entre los escombros y las destrucciones causados por los dos primeros ataques".
Fuentes locales informaron a Reuters de que se había producido una fuerte explosión en un área militar próxima a una escuela de ingenieros ubicada en Tajura.
Sin embargo, el estadounidense al mando de la misión militar aliada en Libia, el almirante Gerard Hueber, ha afirmado que no se dispone de datos que hablen de bajas civiles a consecuencia de los ataques contra suelo libio, pese a las informaciones del régimen del mandatario, Muamar Gadafi, que apuntan lo contrario.
"Estamos presionando a las fuerzas terrestres de Gadafi que amenazan las ciudades", ha comentado en referencia a los ataques aéreos. Hueber recordó que el objetivo de la operación 'Odisea del Amanecer' es "proteger a la población civil", y explicó que se seleccionan los objetivos y planifican las acciones con esta prioridad.
La televisión estatal libia mantiene que hasta la fecha ha habido al menos 60 víctimas mortales y 150 heridos entre los civiles, a consecuencia de los cinco días de bombardeo aéreo de la coalición.
Según sus cifras, los aviones militares han realizado 175 salidas en las últimas 24 horas y 113 de ellas han corrido a cargo de aviones de las fuerzas estadounidenses.
El jefe de Operaciones de la Fuerza Aérea británica, el vicemariscal Greg Bagwell, había insistido en que las fuerzas internacionales pretenden en todo momento proteger a los civiles. "Tenemos a las fuerzas terrestres libias bajo observación constante y les atacamos en cuanto amenazan a los civiles o atacan núcleos de población", ha manifestado Bagwell, citado por la BBC.
Por otra parte, funcionarios libios han llevado a un grupo de periodistas extranjeros a un hospital de Trípoli este jueves para mostrarles los cadáveres de 18 personas, entre militares y civiles, que habrían fallecido a causa de los bombardeos sobre la capital efectuados por las fuerzas militares extranjeras.
Según los reporteros de la agencia Reuters, en la morgue había cadáveres de hombres adultos tendidos sobre camas de metal y tapados con sábanas verdes y blancas. Ésta es la primera vez que se enseñan los cadáveres de supuestas víctimas de los bombardeos de los aliados a periodistas extranjeros en Trípoli.
Sin embargo, los periodistas no vieron cadáveres de mujeres ni de niños. Un trabajador de la morgue, Abdel Salaam, ha afirmado que los fallecidos "son civiles, no son culpables de nada".
Otro trabajador ha dicho que algunos son civiles y otros son soldados que murieron este miércoles por la noche como consecuencia de los ataques contra varios puntos de Trípoli, el principal bastión del líder libio, Muamar Gadafi.