FRENTE SUR: Avance aliado por el este y oeste del Eufrates desde Nasiriya

(Libertad Digital) Bagdad ha sido sometida a un intenso bombardeo estadounidense. Según el director general del Ministerio de Información, Udai al Tai, los misiles y bombas alcanzaron varios edificios de viviendas en Yussufiye, al sur de la capital, causando “numerosas muertes de civiles”. Las autoridades no han permitido el acceso a ningún testigo ni informador. Por la mañana resultó gravemente dañado uno de los edificios de la compañía nacional de telecomunicaciones, situado en el barrio de Al Mansur. La agencia oficial iraní de noticias menciona que la guardia personal de Sadam Husein está impidiendo a la población que abandone la ciudad, lo que se interpreta como un intento para utilizarles como escudos humanos. Al parecer, el régimen está colocando plataformas de lanzamiento de misiles en las zonas residenciales para utilizar la muerte de civiles como propaganda.

Tres mil soldados de la Guardia Republicana, apoyados por cientos de blindados, se encuentran a cincuenta kilómetros de las principales posiciones del 7º Regimiento de Caballería que avanza hacia la capital por el oeste del Eufrates (ver el mapa del especial guerra de Libertad Digital). Las intensas tormentas de arena y lluvia que azotan la zona ubicada entre Kerbala y Nayaf, a cien kilómetros al sur de Bagdad, han obligado a ralentizar el rápido avance inicial hacia la capital iraquí registrado por esta columna de vanguardia. Amparados en las inclemencias del tiempo, las divisiones Al-Medina y Al-Nida recibieron órdenes de salir al encuentro de los soldados aliados. La columna iraquí es blanco constante de los helicópteros “Apache” que han logrado destruir varios tanques. Los primeros combates de la Guardia han empezado por el control de un puente tendido sobre el río Eufrates cerca de la localidad de Abu Sukhayr.

Este jueves, tropas de ambos bandos se encontraban enzarzadas en una intensa batalla por la ciudad de Samawa, dentro del frente que avanza por este frente del oeste del Eufrates hacia Bagdad, a unos 240 kilómetros de la capital. Los soldados de EEUU están disparando proyectiles de tanque y demás armamento pesado, mientras que helicópteros "Apache" intentan dispersar a unos 1.500 "fedayines" iraquíes que protegen un puente sobre el río Eufrates. Los aliados necesitan tomar esa ciudad para que pueda circular por su carretera principal un convoy con suministros de guerra que avanza en dirección norte. Cientos de soldados iraquíes han sido hechos prisioneros en el avance de los marines hacia el norte, según este oficial.

En Nasiriya, (donde se divide el frente aliado para avanzar por el oeste y este del Eufrates) soldados del 8º Regimiento estadounidense continúan asediando la ciudad para acabar con los focos de resistencia. En las operaciones, casi cuarenta “marines” resultaron heridos por fuego amigo. Corresponsales en la zona han mencionado que los militares fueron atacados por obuses y fuego de mortero. Al menos diez vehículos quedaron destruidos, de ellos tres de transporte de tropas, dos todo terreno y una grúa montada sobre un camión. En las afueras de la ciudad, el convoy del grupo logístico de la Primera Fuerza Expedicionaria retrasó su avance por una emboscada de la que no hubo mayores consecuencias. En cambio, a cuarenta kilómetros al norte, en Ash Shatrah, los occidentales han encontrado dura resistencia iraquí.

Otros incidentes de lo que parece será la batalla más cruenta desde el inicio de la guerra se registran en los alrededores de Al Kut, al sur de Bagdad y este del Eufrates, hasta donde han avanzado un millar de "marines" del Cuerpo Expedicionario. El grueso de esta expedición se encuentra todavía en la región de Nasiriya, donde en las misma ciudad todavía se registran combates. Otros 2.000 soldados de la Guardia han sido vistos ya al sur de esa localidad. El parte iraquí habla de “un gran número de soldados muertos de EEUU y Reino Unido”. En el parte diario, el ministro de Sanidad iraquí, Oumid Medhat Moubarak, dijo que el balance oficial de víctimas. Según Bagdad, 350 civiles iraquíes han muerto desde que comenzó la guerra y 3.650 han resultado heridos.

El teniente general Brian Burridge, jefe de las Fuerzas Armadas del Reino Unido en el Golfo, informó de que las tropas aliadas destruyeron casi la totalidad de una columna de tanques y vehículos blindados iraquíes que intentaban avanzar por el sur tras romper el cerco de Basora. "Nos hemos encontrado con una fuerte oposición", dijo Burridge al referirse a la columna tanques y vehículos iraquíes que intentaron romper el cerco anglo-estadounidense en el sur de Basora y que fue atacada por aviones de la coalición militar. En la resistencia participan también unidades paramilitares iraquíes que disponen de morteros y artillería, según el teniente general británico. En la conferencia de prensa, Burridge, dijo que las sus soldados controlan la península de Al Fao -en la que se encuentra el puerto de Um Kasar- y que en esa zona fueron apagados tres pozos de petróleo que estaban en llamas y que siguen incendiados otros seis.

En la mañana de este jueves, al menos cincuenta tanques y vehículos blindados iraquíes lograron romper el sitio sobre Basora impuesto por soldados británicos, fueron destruidos por cazas “Harriers” y “Tornados” procedentes de Kuwait. En la que se considera la mayor batalla con carros de combate del Reino Unido desde la Segunda Guerra Mundial, este jueves catorce tanques "Challenger II" destruyeron un similar número de T-55 iraquíes. Un oficial británico describió el enfrentamiento como "la bicicleta contra el vehículo de motor", por la mayor rapidez y potencia de los vehículos británicos. La Guardia Real de Dragones escoceses disparó obuses contra los tanques y la infantería iraquíes. "El resultado fue de catorce a cero", resumió la fuente. De acuerdo con el Mando Central aliado con base en Doha, Qatar, esas tropas avanzaban hacia el sur, “posiblemente para entregarse, porque la naturaleza movimientos no indican que entrarán en combate”.