Costa de Marfil vive una guerra civil después de que Laurent Gbagbo no aceptara entregar el poder a Alassane Ouattara, reconocido internacionalmente como vencedor de los comicios presidenciales del 28 de noviembre último.
Las tropas de la misión francesa "Licorne", en coordinación con la misión de Naciones Unidas en Costa de Marfil (ONUCI), tomaron el control del aeropuerto internacional de Abiyán, informó el Estado Mayor del Ejército francés.
Francia, además, ha añadido 300 efectivos a los 1.100 que ya tenía desplegados en la capital económica marfileña, donde sus tropas patrullan los barrios donde viven los expatriados y apoyan la labor de la ONUCI.
Una portavoz del Ejército indicó a Efe que la toma de control del aeropuerto está dirigida a permitir el aterrizaje de aparatos civiles y militares para que aquellos extranjeros que lo deseen puedan salir del país.
Tras ello, Francia inició una operación de evacuación hacia la capital togolesa, Lomé, de varios extranjeros residentes en Costa de Marfil, según la Embajada de Francia en Togo a través de un comunicado de prensa.
"Dos aviones Transall del Ejército francés han transportado 77 personas en varias maniobras realizadas en la noche del sábado al domingo", resalta la nota, que no precisa las nacionalidades de los evacuados.
La Legación francesa ha prestado asistencia a los refugiados a su llegada a Togo, en colaboración con las autoridades civiles y militares togolesas.
Los evacuados habían buscado refugio en el cuartel que la fuerza de la Operación Licorne tiene en el barrio de Port Bouet, en la capital económica de Costa de Marfil, Abiyán, en el que se encuentran 1.653 extranjeros, entre ellos alrededor de 750 franceses.
Su único objetivo es el de estar preparado para afrontar cualquier posible cambio en la situación y garantizar la seguridad de los extranjeros en el lugar.
El Ejército indicó también que el número de expatriados que se ha refugiado en la base de Port Bouet que las tropas de la misión "Licorne" tienen en Abiyán se mantiene en 1.400, de los cuales un tercio son de nacionalidad francesa.
En Abiyán se han registrado numerosos saqueos después de que los efectivos del Ejército, la Gendarmería y la Policía, que hasta ahora apoyaban al presidente saliente, Laurent Gbagbo, se retiraran este jueves de la zona, y, según las Fuerzas Armadas galas, los extranjeros llegan a la base para escapar de esos pillajes.
Francia advierte
La presidencia francesa informó de que el jefe del Estado, Nicolas Sarkozy, mantendrá una nueva reunión en el Elíseo con miembros de su gabinete para analizar la situación en el país.
Francia pidió el sábado a las partes en conflicto que se "abstengan estrictamente" de toda violencia contra los civiles y subrayó que los culpables tendrán que rendir cuentas ante la Justicia.
Un día antes había conminado a Gbagbo a ceder el poder de forma "inmediata" a Ouattara y a retirarse para que termine la violencia.
Brutal masacre
El presidente electo de Costa de Marfil se puso el sábado en contacto con el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, para desmentir las acusaciones formuladas por el subdirector de la división de DDHH de UNOCI, Guillaume Ngefa.
El presidente electo de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, ha rechazado tajantemente una acusación de Naciones Unidas por la que se implica a sus simpatizantes en la masacre perpetrada en la ciudad marfileña de Duékoué donde, según observadores de Caritas, más de un millar de personas han muerto acribilladas o a machetazos.
"El Gobierno lamenta las alegaciones de la división de Derechos Humanos de la Misión de Naciones Unidas en Costa de Marfil (UNOCI), que se han presentado sin prueba alguna tras la investigación preliminar", declaró el Gobierno de Ouattara en un comunicado.
Naciones Unidas todavía no ha corroborado la cifra proporcionada por Caritas y mantiene en 330 los fallecidos en la ciudad, 220 de ellos a manos de un grupo de "cazadores tradicionales" conocidos como Dozos, que presuntamente luchaban junto a las fuerzas de Ouattara contra los partidarios del presidente saliente, Laurent Gbagbo; un dato este último que Ouattara también ha desmentido.