LD (EFE) En una entrevista que publica el periódico Le Parisien, el ministro francés del Interior, Nicolas Sarkozy, anunció que unas diez "personas conocidas por promover un discurso islamista radical" serán expulsadas hacia sus países de origen "antes de fin de agosto".
Sarkozy indicó que "hay que actuar contra esos predicadores radicales que pueden influir en los más jóvenes o en los frágiles de espíritu". El ministro del Interior indicó que se utilizará un procedimiento de "prescripción de la nacionalidad" para los que sean franceses, en aplicación de un punto del Código Penal que en la actualidad no se utiliza.
El funcionario anunció un aumento de la seguridad en ciertos vuelos internacionales hacia "destinos sensibles", como Pakistán, Siria y Afganistán, "lugares de paso hacia Irak". Aseguró que "sabemos que al menos siete personas procedentes de Francia murieron allí (en Irak) por la causa de Al-Qaeda -algunos en atentados suicidas- y que hay allí una decena más".