"Consciente estoy de mi próximo fallecimiento y lo considero un honor pues trato de salvarle la vida a los 25 presos políticos", manifestó Fariñas en un mensaje que trasmitió telefónicamente a su portavoz, Licet Zamora, desde el hospital donde está ingresado en Santa Clara.
Zamora dijo a EFE que ese mensaje es una respuesta a la entrevista difundida en medios oficiales de la isla el pasado fin de semana sobre el estado de salud del disidente. "Los únicos responsables de mi futuro deceso son los hermanos Fidel y Raúl Castro. Confío en el equipo médico y paramédico que me atiende. Es por eso que he rechazado las diferentes ofertas que me han hecho para irme a tratar a otros países", dijo el psicólogo y periodista independiente de 48 años.
Esta comunicación sale al paso de una entrevista al doctor Armando Caballero, jefe del equipo que le atienden en el hospital de Santa Clara, publicada el pasado día 3 de julio por Granma, el diario oficial de la dictadura. En dicha entrevista Caballero critica la actitud de Fariñas desde un punto de vista médico, al tiempo que destaca que "sale muy caro" mantener a un paciente que precisa atención médica por su único deseo de no ingerir alimentos.
Fariñas reafirma en su nota su confianza hacia el equipo médico que le atiende, razón por la que dice haber rechazado ofertas de otros países para ir a tratarse al extranjero. "Quiero morir en mi patria ante las narices de los dictadores que poseen las pistolas, fusiles, cañones y bombas. Sólo tengo la moral de ser del pueblo de abajo, engañado y sometido durante 51 años por los que poseen las armas, la violencia y las leyes totalitarias y que desgobiernan desde arriba", afirma Fariñas en la nota.