L D (EFE) El informe cubre el período que va entre octubre de 2002 al 15 de octubre de 2003.
El documento subraya que el Reino Unido sigue siendo un objetivo destacado para los grupos terroristas islámicos, que mantienen su actividad en Alemania, Italia, España y Francia.
Según dice, la mayoría de países occidentales han reforzado sus medidas de seguridad en objetivos potenciales –embajadas, aeropuertos, centrales nucleares o instalaciones militares–, lo que puede llevar a los terroristas a centrarse en "objetivos fáciles", como hoteles, edificios históricos o centros culturales. Esa seguridad habría permitido impedir tales ataques en la UE y EEUU, pero no en objetivos occidentales en otros países, como Arabia Saudí o Marruecos.
España, uno de los objetivos potenciales
Por países, Europol señala la existencia en España de varios grupos terroristas del denominado "Frente Mundial Islámico", que continúa suponiendo la mayor amenaza a sus intereses. El apoyo del Gobierno español a la intervención militar en Irak "constituye sin duda un factor de mayor riesgo para España, pero no el más importante", afirma el documento.
Según Europol, el ataque contra la Casa de España en Casablanca podría estar relacionado no sólo con el conflicto armado en Irak, sino con otros factores, como la campaña llevada a cabo en los últimos meses por grupos islamistas radicales que tienen como objetivo el estilo de vida occidental y lo que ellos consideran la decadencia moral de occidente. Asimismo, alerta de la "creciente" presencia en España de elementos radicales musulmanes, especialmente en mezquitas y centros de enseñanza del Corán, que utilizan como centros clandestinos.
Alemania, Italia y Francia, también en peligro
Uno de los países donde se ha detectado una mayor actividad es Alemania, donde hay un importante grupo "potencial de combatientes islámicos" que estarían "dispuestos a preparar y realizar ataques terroristas". Europol expresa también su preocupación por Italia, debido a las relaciones estrechas entre varias organizaciones y a la posible explotación por parte de líderes islámicos carismáticos de la marginación de los jóvenes inmigrantes. En Francia, los servicios de seguridad han impuesto una fuerte presión a los movimientos islámicos, según el documento.
Europol recuerda también que Ayman al Zawahiri, el "número dos" de Al-Qaeda, amenazó a los países occidentales aliados de Estados Unidos y anunció una "gran batalla". Hay además otro factor de riesgo, que es el aumento de la frustración dentro de las comunidades musulmanas y el crecimiento de las acciones antisemitas a causa del ataque contra Irak y de la crisis de Oriente Medio.
Este documento pasará ahora al Parlamento Europeo para informar a los eurodiputados del fenómeno del terrorismo que tiene como objetivos a los Estados miembros de la Unión.