L D (Agencias) El portavoz del Ministerio Fiscal, Franklin Wattimena, confirmó este viernes a Efe que el pariente de "El Chino" se encontraba entre los primeros cinco sospechosos liberados. "El Chino" fue uno de los terrorista que murió en Leganés tres semanas después de los atentados del 11-M en Madrid.
Tras no encontrar explosivos en los domicilios registrados y basándose en los resultados de los interrogatorios, la policía liberó finalmente a los otros dos detenidos. Ninguno de los liberados sigue siendo sospechoso de terrorismo, precisó el portavoz del Ministerio Fiscal.
La ministra holandesa del Interior, Huusje Ten Horst, declaró este viernes a la cadena de televisión local NOS que "finalmente ha resultado ser menos de lo que se pensaba (...), pero es razonable tomar en serio estas advertencias". El primer ministro de Holanda, Jan-Peter Balkenende, dijo que "ha sido adecuado tomar el aviso en serio porque la seguridad de la gente y de los dependientes es prioritaria".
Las detenciones tuvieron lugar este jueves, tras las amenazas a un importante centro comercial de Ámsterdam, y a partir de una llamada que según ha confirmado LD se realizó desde Bélgica detallando la identidad y direcciones de los detenidos. En contra de lo que se dijo al principio, cinco de los detenidos ayer son holandeses de origen marroquí y otros dos tienen solamente nacionalidad marroquí, según confirmaron a Efe fuentes de la fiscalía.
La policía belga también ha realizado registros domiciliarios en Bruselas, y hasta el momento no se han producido detenciones. La investigación, que sigue su curso y en la que colaboran las autoridades belgas, está dirigida a descubrir la identidad de la persona que la noche del miércoles al jueves alertó a la policía de que se produciría un atentado en el que habría muchas víctimas. La policía holandesa fue alertada, en la noche del miércoles al jueves, de una amenaza terrorista contra el centro comercial "Boulevard Arena".
El aviso fue realizado mediante una llamada desde Bruselas por teléfono móvil, en la que se avisaba de que tres hombres iban a colocar explosivos en tres establecimientos del concurrido espacio comercial –situado en las proximidades del estadio del club de fútbol Ajas–, en donde, entre otras tiendas, se hallan los almacenes Ikea. Las tiendas, que este viernes estuvieron abiertas al público, contaron durante todo el día con vigilancia policial tanto en la calle como con un helicóptero sobrevolando la zona.
Tras no encontrar explosivos en los domicilios registrados y basándose en los resultados de los interrogatorios, la policía liberó finalmente a los otros dos detenidos. Ninguno de los liberados sigue siendo sospechoso de terrorismo, precisó el portavoz del Ministerio Fiscal.
La ministra holandesa del Interior, Huusje Ten Horst, declaró este viernes a la cadena de televisión local NOS que "finalmente ha resultado ser menos de lo que se pensaba (...), pero es razonable tomar en serio estas advertencias". El primer ministro de Holanda, Jan-Peter Balkenende, dijo que "ha sido adecuado tomar el aviso en serio porque la seguridad de la gente y de los dependientes es prioritaria".
Las detenciones tuvieron lugar este jueves, tras las amenazas a un importante centro comercial de Ámsterdam, y a partir de una llamada que según ha confirmado LD se realizó desde Bélgica detallando la identidad y direcciones de los detenidos. En contra de lo que se dijo al principio, cinco de los detenidos ayer son holandeses de origen marroquí y otros dos tienen solamente nacionalidad marroquí, según confirmaron a Efe fuentes de la fiscalía.
La policía belga también ha realizado registros domiciliarios en Bruselas, y hasta el momento no se han producido detenciones. La investigación, que sigue su curso y en la que colaboran las autoridades belgas, está dirigida a descubrir la identidad de la persona que la noche del miércoles al jueves alertó a la policía de que se produciría un atentado en el que habría muchas víctimas. La policía holandesa fue alertada, en la noche del miércoles al jueves, de una amenaza terrorista contra el centro comercial "Boulevard Arena".
El aviso fue realizado mediante una llamada desde Bruselas por teléfono móvil, en la que se avisaba de que tres hombres iban a colocar explosivos en tres establecimientos del concurrido espacio comercial –situado en las proximidades del estadio del club de fútbol Ajas–, en donde, entre otras tiendas, se hallan los almacenes Ikea. Las tiendas, que este viernes estuvieron abiertas al público, contaron durante todo el día con vigilancia policial tanto en la calle como con un helicóptero sobrevolando la zona.