El delegado en funciones del Frente Polisario en España, Mohamed Jadad, hizo esta petición al considerar que la presidencia europea es una "gran ocasión para empujar en el sentido del respeto a la legalidad internacional" en el Sáhara Occidental.
Jadad, en declaraciones a Efe, aseguró que el reconocimiento del derecho de autodeterminación debe ir acompañado de la celebración del referéndum para que los saharauis decidan la independencia, la autonomía o la integración en Marruecos de la que fuera colonia española hasta 1975.
"No queremos crear problemas entre España y Marruecos, pueden tener buenas relaciones, pero España debe asumir su responsabilidad histórica y empujar hacia el referéndum", dijo Jadad.
El dirigente del Polisario opinó que la primera cumbre entre la UE y Marruecos que se celebrará en Granada el próximo 8 de marzo es una ocasión para exigir al país magrebí que respete los derechos humanos en los territorios ocupados y cese su represión. Si no lo cumpliese, añadió, Marruecos no puede tener la consideración de socio privilegiado que le concedió la UE en octubre de 2008.
Jadad animó al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a "quitarse el temor" hacia Marruecos e inclinarse por una relación bilateral "de respeto, no de chantaje, ni a cualquier precio". "De lo contrario, es como un perro enfurecido al que hay que darle huesos porque si no, empieza a ladrar", comparó.
Jadad cree que la solución al caso de la activista Aminatu Haidar, después de la intervención de Francia y de que el Gobierno español aceptara que la ley marroquí es la que impera en el Sáhara Occiental, es una prueba de que Marruecos da un trato distinto a sus dos vecinos europeos. "Marruecos, haga lo que haga España, reserva la palabra amigo a otros países, no a España", resumió.
El delegado del Polisario insistió en que "Marruecos no es la potencia administradora del territorio, sino la ocupante", de acuerdo con la doctrina de la ONU.
Así, denunció el acoso que está llevando a cabo la Policía marroquí a la casa de Haidar en El Aaiún, la capital del Sáhara Occidental, después de poner fin el pasado 17 de diciembre a 32 días de huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote.
Si Marruecos continuase con este hostigamiento a Haidar y a otros activistas saharauis, será "el germen de otro problema", advirtió Jadad. "Por eso, es urgente tomar cartas en el asunto y trabajar para una solución, no mirar para otro lado", concluyó.