LD (EFE) La derrota que el ex gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, sufrió en las presidenciales frente al actual mandatario, Luiz Inácio Lula da Silva, no impidió a la mayor fuerza de la oposición imponerse en dos de las elecciones regionales este domingo, cuando los brasileños volvieron a las urnas para elegir en segunda vuelta al jefe de Estado y a diez de los veintisiete gobernadores.
El PSDB, que se hizo con cuatro gobiernos regionales en la primera vuelta, también gobernará los estados de Río Grande do Sul, y de Paraíba, en tanto que el PT estará al frente de cinco. El partido venció en primera vuelta las elecciones regionales en los estados de Sao Paulo, Minas Gerais, Alagoas, y Roraima, y la formación de Lula en Acre, Sergipe, Piauí y Bahía.
Pese al aparente empate, el PT se impuso en estados de menor importancia relativa y la formación de Alckmin obtuvo los dos mayores colegios electorales del país (Sao Paulo y Minas Gerais). En Río Grande do Sul, un antiguo bastión del PT, la diputada Yeda Crusius, del PSDB, obtuvo hoy el 53,96 por ciento de los votos y derrotó al ex ministro de las Ciudades de Lula, Olivio Dutra (46,04 por ciento), un importante correligionario del jefe de Estado. El actual gobernador de Paraíba, Cassio Cunha Lima, igualmente del PSDB, consiguió la reelección con el 51,35 por ciento de los votos, frente al 48,65 por ciento de José Maranhao, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB).