L D (Agencias) Los doctores salían así al paso de una información divulgada esta mañana por el canal de televisión por satélite qatarí "Al Yazira", desde donde se aseguraba que Mohamed al-Fateh, el "niño milagro", había fallecido a consecuencia de sus heridas. "El niño únicamente ha perdido una pierna, aunque tiene grandes quemaduras en todo su cuerpo", explicaron los médicos, citados por radios locales. Al-Fateh es el único superviviente del accidente que el martes se cobró la vida de los otros 115 pasajeros que viajaban con él en un avión de las líneas aéreas "Sudan Airways", que pretendía volar de Port Sudan, en el este del país, a la capital, Jartum.
El aparato, un viejo boeing 737, se estrelló pocos después de despegar, al parecer por problemas técnicos derivados de un deficiente mantenimiento. Minutos antes del siniestro, el piloto del avión informó a la torre de control de que se disponía a regresar a pista tras detectar un fallo mecánico. Según las autoridades sudanesas, la madre de Al-Fateh pereció en el accidente, mientras que su padre y una hermana mayor esperan su recuperación en la ciudad de UmDurman, pegada a Jartum. "Un nómada lo encontró llorando en un matorral y se lo entregó a uno de los miembros de los equipos de socorro", explicó la tía del pequeño, Jadiya Abu Sabaa, quien se desplazó hasta Port Sudán para hacerse cargo de su sobrino.
Según la lista de pasajeros, otros 14 niños volaban en el avión, en el que también viajaban siete ciudadanos extranjeros - tres indios, un británico, un chino, un etíope y un emiratí. "Los cuerpos han sido enterrados en una fosa común tras rezar una oración musulmana, ya que las condiciones en las quedaron los cuerpos no permiten entregarlos a las familias", explicó el gobernador de Port Sudán, Hatem al-Wassil, a quien cita la agencia oficial de noticias local SUNA.
El aparato, un viejo boeing 737, se estrelló pocos después de despegar, al parecer por problemas técnicos derivados de un deficiente mantenimiento. Minutos antes del siniestro, el piloto del avión informó a la torre de control de que se disponía a regresar a pista tras detectar un fallo mecánico. Según las autoridades sudanesas, la madre de Al-Fateh pereció en el accidente, mientras que su padre y una hermana mayor esperan su recuperación en la ciudad de UmDurman, pegada a Jartum. "Un nómada lo encontró llorando en un matorral y se lo entregó a uno de los miembros de los equipos de socorro", explicó la tía del pequeño, Jadiya Abu Sabaa, quien se desplazó hasta Port Sudán para hacerse cargo de su sobrino.
Según la lista de pasajeros, otros 14 niños volaban en el avión, en el que también viajaban siete ciudadanos extranjeros - tres indios, un británico, un chino, un etíope y un emiratí. "Los cuerpos han sido enterrados en una fosa común tras rezar una oración musulmana, ya que las condiciones en las quedaron los cuerpos no permiten entregarlos a las familias", explicó el gobernador de Port Sudán, Hatem al-Wassil, a quien cita la agencia oficial de noticias local SUNA.