Militares, políticos y miembros de la sociedad civil se reunieron este miércoles en la sede del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (CESEDEN) para analizar el futuro de la OTAN en una jornada organizada por la Asociación Atlántica Española, que contó con la colaboración del ministerio de Asuntos Exteriores y del Instituto Español de Estudios Estratégicos, perteneciente al ministerio de Defensa.
La misma, fue inaugurada por el general del aire José Julio Rodríguez, jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), quien reconoció que la organización aliada está perdiendo la iniciativa en Afganistán y que hay un "importante deterioro de la situación".
Pese a esto, comparó la situación actual de la intervención aliada en el país asiático con la que se produjo en Serbia debido a la limpieza étnica que se estaba llevando a cabo en su provincia de Kosovo. El JEMAD recordó que tras la primera oleada de acciones militares contra el país, los socios de la OTAN comenzaron a tener dudas porque los resultados esperados no llegaban, pero que posteriormente, con el aumento de tropas, se dio un "golpe definitivo" a la intervención.
A su juicio, esto mismo es lo que ocurrirá en Afganistán, que tras el aumento de tropas que están preparando los aliados, "podrán recuperar la iniciativa", aunque no se atrevió a apuntar si también supondrá un "golpe definitivo" en el país asiático. Precisamente destacó esto último como una de las principales virtudes de la OTAN: "La Alianza es capaz de reaccionar cuando su prestigio está en juego".
José Julio Rodríguez consideró que es "un buen momento para reflexionar sobre el futuro de la OTAN" y recordó sus principales defectos: "la lentitud en la toma de decisiones y la excesiva dependencia militar de los Estados Unidos", aunque aseguró que éstos defectos "son el precio que hay que pagar para que la Alianza exista. Es lenta cuando el problema surge lejos de sus fronteras, pero es capaz de actuar lenta pero segura", dijo.
Tras esto, reivindicó la importancia que la propia OTAN tiene en nuestro país: "Para España, la OTAN es uno de los puntales de su seguridad. España quiere que la Alianza siga proporcionando seguridad a sus miembros y debe adptarse a los cambios del nuevo mundo global, complementándose con la Unión Europea".