LD (EFE) Tras el anuncio la semana pasada del IRA de suspender el desarme, el Gobierno y la oposición en Irlanda del Norte consensuaron en el parlamento el texto de una moción parlamentaria donde exigen a los terroristas su desarme total. La iniciativa partió del principal partido opositor, el Fine Gael. El líder de esa formación, Enda Kenny, defendió que la actividad paramilitar no puede continuar.
Durante el debate parlamentario, el primer ministro irlandés, Bertie Ahern, aseguró que el Gobierno ya no está dispuesto a dejar en libertad a los autores del asesinato del detective Jerry McCabe como parte del proceso de paz de Irlanda del Norte. Cuatro miembros del IRA cumplen condena por la muerte de ese policía, que en junio de 1996 fue tiroteado durante el asalto a una furgoneta de correos en el condado de Limerick, al sur del país.
Ahern dijo que su propuesta de liberar a los detenidos, anunciada el pasado diciembre cuando el proceso de paz parecía ir por el buen camino, fue "un riesgo" que Dublín "estaba preparado para asumir en unas circunstancias particulares". Sin embargo, el robo de unos 38 millones de euros en la sucursal principal del Northern Bank en Belfast el pasado diciembre, atribuido al IRA por la policía norirlandesa, supuso un nuevo varapalo para el frágil proceso de paz.