L D (Agencias) El Gobierno español ha aprobado en el Consejo de Ministros de este viernes la enajenación de ocho juegos de lanzadores de bombas de aviación para su cesión a las Fuerzas Armadas de Marruecos.
Se trata de material valorado en 86.848 euros que el Ministerio de Defensa ya ha sustituido por piezas más modernas y que ahora pasarán al país vecino por el precio simbólico de un euro.
Según el Gobierno el acuerdo se enmarca en el contexto de colaboración entre ambos países y tiene por objeto "fortalecer la especial relación de hermandad existente entre las Fuerzas Armadas de España y Marruecos".
Se trata de material valorado en 86.848 euros que el Ministerio de Defensa ya ha sustituido por piezas más modernas y que ahora pasarán al país vecino por el precio simbólico de un euro.
Según el Gobierno el acuerdo se enmarca en el contexto de colaboración entre ambos países y tiene por objeto "fortalecer la especial relación de hermandad existente entre las Fuerzas Armadas de España y Marruecos".
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, viajará el próximo lunes a Rabat, donde participará junto a sus homólogos del "Grupo 5+5" (España, Francia, Italia, Portugal y Malta, por la parte europea, y por Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Túnez, por la ribera sur del Mediterráneo) en una reunión sobre asuntos de la agenda multilateral, según han informado fuentes de Exteriores.
Esta será la segunda visita de Moratinos a Marruecos en apenas dos semanas. El día 3 de enero el ministro, en un viaje relámpago, llevó a Rabat una carta de Mohamed VI dirigida a Zapatero, cuyo contenido se desconoce. Tres días después regresó el embajador marroquí a Madrid, que había sido llamado a consultas por la visita de los Reyes a Ceuta y Melilla, ciudades españoles que Marruecos pretende anexionarse. Las primeras palabras del embajador, ya en Madrid, reiteraron esta exigencia del régimen de Mohamed VI.
Esta será la segunda visita de Moratinos a Marruecos en apenas dos semanas. El día 3 de enero el ministro, en un viaje relámpago, llevó a Rabat una carta de Mohamed VI dirigida a Zapatero, cuyo contenido se desconoce. Tres días después regresó el embajador marroquí a Madrid, que había sido llamado a consultas por la visita de los Reyes a Ceuta y Melilla, ciudades españoles que Marruecos pretende anexionarse. Las primeras palabras del embajador, ya en Madrid, reiteraron esta exigencia del régimen de Mohamed VI.