L D (EFE) Annan escribió en su informe, emitido hace dos semanas, que el acuerdo entre las partes parecía “aún más distante” que hace unos meses, y que no había rastro de las medidas que pudieran adoptarse para “superar” el “estancamiento”. Por ello, demandó que se extendiera hasta finales de abril el mandato de la misión que mantiene la ONU en la zona desde hace 13 años. Actualmente son 227 los efectivos encargados de vigilar el alto el fuego entre las fuerzas marroquíes y las saharauis.
El Consejo de Seguridad respaldó este jueves la sugerencia de Annan, que en el mencionado escrito sostenía que la situación había empeorado por el “recrudecimiento” del enfrentamiento dialéctico entre las partes.
El Consejo de Seguridad respaldó este jueves la sugerencia de Annan, que en el mencionado escrito sostenía que la situación había empeorado por el “recrudecimiento” del enfrentamiento dialéctico entre las partes.
El principal obstáculo en la resolución del conflicto es la negativa del régimen de Rabat a aceptar el Plan Baker, ampliamente respaldado tanto por el Consejo de Seguridad como por los demás implicados en el conflicto. Dicho plan, elaborado por el anterior enviado especial de Annan para el Sahara, James Baker, prevé el establecimiento de un período autonómico transitorio de cinco años, tras el cual se celebraría un referéndum de autodeterminación.
Pero la potencia ocupante rechaza cualquier iniciativa que posibilite el acceso del territorio a la independencia: sólo está dispuesta a negociar un estatuto de autonomía. El embajador de Marruecos ante la ONU, Mohamed Benouna, dijo que, en este punto, su país solicitará consejo a países con tradición autonomista, como España.
El representante del Frente Polisario ante Naciones Unidas, Ahmed Bujari, culpó a Rabat del estancamiento en que se encuentra el proceso de paz, y reiteró que cualquier acuerdo debe pasar por la “autodeterminación” del pueblo saharaui. Asimismo, expresó su deseo de que, “al final de esta prórroga”, el Consejo de Seguridad “asuma sus responsabilidades”.
El representante del Frente Polisario ante Naciones Unidas, Ahmed Bujari, culpó a Rabat del estancamiento en que se encuentra el proceso de paz, y reiteró que cualquier acuerdo debe pasar por la “autodeterminación” del pueblo saharaui. Asimismo, expresó su deseo de que, “al final de esta prórroga”, el Consejo de Seguridad “asuma sus responsabilidades”.