LD (EFE) Cientos de personas están cruzando el paso de Rafah, en la frontera entre Egipto y Gaza, que permanecerá abierto durante 48 horas. El cruce permanecía cerrado oficialmente desde que Israel se retiró de la franja el pasado día doce. El objetivo, según autoridades palestinas y egipcias, es resolver problemas de carácter humanitario, como el de los enfermos y estudiantes, o permitir el regreso de palestinos que han quedado del otro lado.
Efectivos de seguridad egipcios y palestinos supervisan el paso de personas y mercancías. Esta es la primera vez que el paso fronterizo se abre desde la retirada de Israel, ya que este país se opone a su funcionamiento por temor a que las organizaciones terroristas introduzcan armas en la franja de Gaza.
Inmediatamente después de la retirada, miles de palestinos forzaron su paso hacia el lado egipcio durante cuatro días y por distintas brechas abiertas en la frontera, lo que generó la indignación de Israel. La ANP confirmó que los terroristas habían pasado de contrabando grandes cantidades de armas, drogas y otros productos, pero desde entonces ha conseguido cerrar la brechas en una operación en la que participan cerca de dos mil agentes.