LD (EFE) El último atentado terrorista ha tenido lugar en el oeste de Bagdad, justo cuando una bomba estallaba al paso de una patrulla del Ejército iraquí que circulaba cerca del hospital Yarmuk. El atentado se ha saldado con la muerte de dos civiles y otros siete resultaron heridos, varios de ellos de gravedad. Poco después, los barrios de Al-Amiriya y Ad-Dora, eran escenario de enfrentamientos entre terroristas y policías. Siete civiles resultaban heridos mientras que un criminal moría.
Horas antes, al menos ocho civiles murieron en nuevos atentados registrados en Bagdad, mientras que el Ejército de EEUU anunció la muerte en combate de uno de sus soldados en el oeste de Irak. En el primero de ellos, seis iraquíes, incluido un niño, perdieron la vida y siete más resultaron heridos en la explosión de una bomba en una carretera del barrio Al-Amiriya.
En un segundo ataque, un grupo de terroristas asesinó a dos civiles que trabajaban para una organización no gubernamental iraquí en el interior de la llamada "zona verde", también en el oeste de Bagdad. En ese área, protegida por las tropas estadounidenses, están las embajadas de EEUU y el Reino Unido, así como las instalaciones del Gobierno interino iraquí.